Tras confirmar fuentes de los servicios de inteligencia de EEUU que el avión de Malaysian Airlines MH17 que se estrelló en el este de Ucrania recibió el impacto de un misil tierra-aire, ahora la compañía ha hecho público un comunicado en el que ha asegurado que el avión en el que viajaban 298 pasajeros hacia Kuala Lumpur, había superado todas las inspecciones de mantenimiento y estaba en buen estado tras 17 años de servicio. Después de encontrar la segunda caja negra del avión, la aerolínea ha asegurado que el aparato pasó con éxito la última revisión el 11 de julio en el hangar que la compañía tiene en el aeropuerto de Kuala Lumpur y que la próxima inspección debía realizarla el 27 de agosto. Además, ha confirmado que todos los sistemas de comunicación del avión funcionaban correctamente antes del siniestro. Ante este siniestro, el Gobierno ucraniano y los rebeldes prorrusos se acusan mutuamente de la autoría del atentado. Estos últimos están dispuestos a aceptar una tregua con las fuerzas de Kiev para que se investigue el accidente del avión malasio, ha señalado el viceprimer ministro de la formación separatista, Andrei Purguín. Por su parte, el presidente ruso, Vladímir Putin, ha dicho que la catástrofe requiere una investigación «escrupulosa y objetiva». Y ha señalado que el suceso demuestra la necesidad de que se llegue cuanto antes a un arreglo pacífico del conflicto en el este de Ucrania. «El jefe del estado ruso subrayó que la tragedia ocurrida demuestra una vez más la necesidad de que se llegue cuanto antes a un arreglo pacífico de la grave crisis en Ucrania, y subrayó que se requiere una investigación exhaustiva y objetiva sobre las circunstancias de la catástrofe», según se ha afirmado en un comunicado del Kremlin. Malaysia Airlines publicará las identidades de los pasajeros del avión una vez se haya puesto en contacto con los familiares de todos ellos.