'Loreak' juega en casa

Se ha convertido en la primera película rodada íntegramente en euskera que compite en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián. Loreak juega en casa. Dirigida por Jon Garaño y Jose Mari Goenaga, ha gustado por su sutileza y por su belleza. Se trata de una película intimista que no se dice por un único género. El misterio de quién regala ramos de flores, el drama de la pérdida de un ser querido y algunos momentos de comedia negra, como cuando se insiste en llamar a la policía por recibir flores.

Loreak es una de esas historias mínimas que refleja el carácter de los vascos, de su clima, de su tierra; pero que es universal. El día a día de tres mujeres se ve alterado por la misteriosa presencia de unos ramos de flores. Las protagonistas femeninas reaccionan entre la curiosidad y el miedo. "Las flores eran como un lienzo en blanco, porque cada uno proyecta en ellas sus deseos. Un elemento sin significado se convierte en algo muy profundo, con significado. Las dos tramas hacen que las flores sean a la vez ilusión y amenaza", han contado los directores.

Jon Garaño y Jose Mari Goenaga firman su segunda película sobre mujeres. La primera 80 egunean retrataba una relación lésbica entre dos señoras mayores, Loreak mezcla dos historias con tres mujeres que están pasando un momento complicado en sus vidas. "Escribimos sobre sentimientos universales, y puede que las mujeres y los hombres no estemos tan alejados", han señalado los realizadores de una película que podría colarse en el palmarés del festival por su emotividad y por todos los sentimientos que provoca.

Rivalidad entre hermanos y la importancia de lo que no decimos

Si en Loreak confirmábamos lo que los vascos no verbalizan, en la chilena La Voz en off, de un tempo y un género distintos, vemos lo mucho que verbalizan los chilenos y lo poco que se dicen. El director de Valdibia Cristián Jiménez ha dejado buen sabor de boca con su tercer largometraje, La voz en off. La cinta es una comedia familiar sobre la incomunicación entre generaciones. "Las cosas han cambiado tanto en Chile en tan poco tiempo que las nuevas generaciones y las antiguas tenían pocos puntos en común", reflexiona el cineasta que nos muestra a una abuela chateando con su nieta por internet, a una madre vegetariana y contraria a la tecnología.

La voz en off tiene momentos divertidos, que caricaturizan a la familia media. La rivalidad entre hermanos y la competición estúpida a la que a veces asistimos, son otros temas de los que habla la cinta y que componen las pequeñas historias de los miembros de una familia afincada en Valdivia, que hablan mucho y dicen poco.