Los barriles bomba de Al Assad siguen matando civiles en Siria
Decenas de personas han muerto al norte de Idlib por el lanzamiento de barriles explosivos desde helicópteros del régimen. Mientras, llegan a Kobani combatientes kurdos y del Ejército Libre Sirio para defender la ciudad del asedio del Estado Islámico
La última masacre del régimen del Bashar al Assad ha ocurrido al norte de la provincia de Idlib. Un helicóptero ha dejado caer al menos dos barriles bomba sobre un campo de desplazados, causando decenas de víctimas.
Un vídeo colgado en youtube muestra decenas de cuerpos de mujeres y niños calcinados, mientras los supervivientes tratan de ayudar a los heridos. Según Al Jazeera hay al menos 60 muertos.
Apenas ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, organización con sede en Londres y convertida en el mejor referente para hablar de cifras de víctimas en el conflicto, daba cuenta de que en los últimos siete días los helicópteros de Al Assad han matado al menos a 182 civiles por el lanzamiento de al menos 276 barriles bomba. Entre los fallecidos hay 60 niños. Los ataques con estos rudimentarios explosivos han dejado heridas a otras 300 personas.
Desde que comenzó la guerra en Siria han muerto al menos 200.000 personas. Otros diez millones han tenido que dejar su hogar o el país.
Refuerzos para la lucha contra ISIS en Kobani
Tras recibir el permiso del gobierno turco, una caravana de vehículos de las milicias kurdas de Irak se suma a la lucha que sus hermanos sirios mantienen contra el Estado Islámico en la ciudad de Kobani.
Se trata de unos 150 peshmerga, que aportarán armas antitanque y artillería pesada, algo que les falta a los milicianos kurdos que llevan un mes defendiendo la ciudad. Han viajado desde el norte de Irak atravesando el sur de Turquía, donde han sido jaleados por miles de personas en el camino.
Los ataques aéreos de Estados Unidos no han logrado frenar a los combatientes de ISIS en Kobani, uno de los principales enclaves kurdos de Siria. 200.000 personas han dejado la ciudad, en la que han muerto según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos más de 800 personas.
Además de la caravana por tierra, otro centenar de milicianos kurdos ha volado hasta Sanliurfa, en Turquía, para sumarse a los refuerzos.
También los combatientes del Ejército Libre Sirio pretenden impedir la caída de Kobani. Un primer grupo de medio centenar ya está defendiendo la ciudad, y se espera que cientos más se unan en los próximos días.