María Casado rompe a llorar tras una reprimenda a Curri Valenzuela

Sofocón en directo el que se ha llevado este martes la presentadora de 'Los desayunos de TVE', María Casado delante de las cámaras ante las cuales no ha podido contener las lágrimas.

A Casado se le ha quebrado la voz y los ojos se le han humedecido cuando se ha dirigido a su audiencia para pedir disculpas públicas a Curri Valenzuela por haberla interrumpido, minutos antes, en una de sus largas disertaciones.

El inicio del encontronazo se ha producido cuando Casado iba a dar paso al invitado de este martes, Antonio Garamendi presidente de CEPYME, justo después de una información sobre las prospecciones petrolíferas en Canarias de la que ha pedido la presentadora la opinión de sus tres tertulianas del programa de hoy.

En primer lugar se ha expresado la periodista Anabel Díez, de El País, que ha opinado durante unos 50 segundos. Tras ella lo ha hecho Pilar Gómez de 'La Razón' ha expuesto sus argumentos durante algo menos de minuto y medio.

Curri Valenzuela cerraba este turno de opinión sobre la búsqueda de petróleo en Canarias y lo hacía por espacio de minuto y cuarenta segundos cuando ha sido interrumpida por María Casado que, en tono de broma, le decía: “Curri, que tenemos visita, que coges la pelota y no la sueltas” (en el vídeo min: 01:02:45). La tertuliana, con un gesto de disconformidad, le ha espetado a Casado: "Solo me cortas a mí, a las demás les dejas hablar todo el rato".

María Casado, entre risas, comentaba "tres minutos aquí tú sola raca-raca". Un tanto molesta, Curri le retaba: "¿a que me cronometro y llevo menos que Pilar y Ana?". Frase que Casado ha obviado comentar y ha dado paso a la entrevista de Garamendi.

En un momento dado de la entrevista (min. 01:15:10 del vídeo), María Casado ha hecho un inciso para disculparse con Curri por lo ocurrido minutos antes: "Quería hacer un inciso en el programa. Quería pedir disculpas públicamente, en este caso, a Curri Valenzuela, porque por mi culpa, sé está llevando un disgusto fuerte", ha afirmado Casado que terminaba esta frase con la voz quebrada y los ojos llorosos en un primer plano de cámara que rápidamente se ha abierto a un plano general de la mesa de tertulia en el que aún se podía ver a María Casado llevándose un pañuelo a la cara para secarse las lágrimas.

En un intento de evitar el espectáculo, la realización ha optado por primeros planos de las tertulianas que tomaban la palabra para preguntar al invitado. Sin embargo, no se ha cortado el micro de Casado con lo que aún se la ha podido escuchar sollozar durante unos segundos más ante el estupor de los allí presentes que no sabían muy bien qué hacer ni hacia dónde mirar.