Si vas a pedir asilo, prueba tu orientación sexual pero con dignidad
El Tribunal de Luxemburgo aclara que es legal comprobar la veracidad de una solicitud de asilo por orientación sexual pero no humillar, examinar o entrometerse en la vida de quienes lo piden.
Preguntar a un solicitante de asilo para comprobar si, como manifiesta en su solicitud, es gay no es ilegal, siempre que no se indague de manera intrusiva y humillante. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (Tribunal de Luxemburgo) ha sentado doctrina a petición de Holanda, que denegó la solicitud de asilo a tres africanos por considerar que no quedaba suficientemente probada su sexualidad.
Lo que ahora se ratifica es la recomendación de uno de los abogados generales del organismo, que el pasado julio ya establecía la necesidad de que los controles por parte de los estados no afectaran a los derechos básicos de los solicitantes.
La sentencia del Tribunal es de obligado cumplimiento, aunque en este caso lo que hace es más bien aclarar una serie de directrices a los países de la Unión sobre hasta dónde pueden llegar en la legítima documentación de un caso de asilo. Los jueces dicen que no se pueden hacer ‘exámenes’ para comprobarlo, como sucedió hace varios años con la República Checa, que ‘medía’ la excitación sexual de los investigados enseñándoles pornografía.
No será válido rechazar una solicitud porque, por ejemplo, una solicitante no se ajusta en sus respuestas a la idea preconcebida de cómo es una lesbiana. Y ni siquiera será válido el ofrecimiento, como sucedió con uno de estos tres hombres, de grabaciones de video de actos íntimos para probar que se es gay.
Si de por si hay países de la Unión en los que la solicitud de asilo es una carrera de obstáculos, si el motivo aludido era la persecución que sufrían gays, lesbianas o transgénero la desprotección era mucho mayor. El Parlamento Europeo fijó unos mínimos comunes para los países miembros en 2013, que consolidaba definitivamente el derecho a asilo para estas personas. Un tema de especial relevancia ante las iniciativas de países como Uganda para criminalizar la homosexualidad.
En una entrevista en Hora 25 el pasado junio, hablando sobre las solicitudes de asilo por motivo de orientación sexual en España, la portavoz de CEAR Estrella Galán decía que "España es un país con unas tasas de protección internacional muy bajas. Por eso, pese a que este colectivo está contemplado en la ley, no es un país que tengan como referente para pedir protección".