¿La ruta de la peonza?
Durante siglos sólo la seda hizo rentable el transporte por tierra entre China y España. Ahora puede serlo para contenedores cargados de peonzas
El primer tren de mercancias chino en cubrir la ruta Yiwu-Madrid en 21 días / GETTY IMAGES
Madrid
Durante siglos, hasta el auge de los descubrimientos de los siglos XV y XVI, estuvo abierta una larguísima ruta comercial que unía por tierra China con el Mediterráneo. Un viaje lleno de dificultades y peligros que se justificaba por el gran valor de la mercancía transportada: la seda, cuya técnica de elaboración se desconocía en Occidente.
En la actualidad el comercio entre China y Europa mueve ingentes cantidades de mercancías. Sólo entre China y España en lo que va a de año se han transportado más de medio millón de contenedores hacia nuestro país, y unos 300.000 en sentido contrario. Hasta ahora todo este comercio se ha hecho por mar.
Pero el ferrocarril público alemán, la Deutsche Bahn, culmina este lunes un primer transporte de mercancías por tierra entre China y España. Contenedores de más de 13 metros de longitud habrán recorrido algo más de 13.000 km en 21 días, siempre en tren, con tres trasvases de vagón incluidos para salvar los cambios de ancho de vía entre China y Kazajstán, entre Bielorrusia y Polonia, y entre Francia y España.
Vienen de Yiwu, el principal centro mayorista en el mundo de lo que se conoce como "pequeños bienes de consumo". Por ejemplo: peonzas, que abarrotan uno de los contenedores. La empresa no da más detalles, pero todo indica que buena parte de los productos que van a realizar este viaje, que deja corto al mítico transiberiano, irán a nutrir las tiendas de todo a cien en nuestro país. Justo la antítesis de lo que la seda significó durante más de un milenio en Occidente.
La Deutsche Bahn tiene ya una línea de mercancías regular entre China y Alemania. Una filial suya en España, Transfesa -con una participación minoritaria de Renfe- se encarga del tramo español.
Está por ver que sea rentable y competitiva esta alternativa para un viaje semejante. Es lo que se intenta comprobar. Lo es, en determinados casos al menos, entre China y Alemania. Pero nuestro país está 2.000 km más lejos por tierra. Y 3.000 km más cerca por mar. A las dificultades logísticas del transporte los directivos de la Deutsche Bahn deberán sumar ahora las dificultades del cálculo económico para decidir si culminan su proyecto de establecer una línea regular de mercancías por tren China-España. Si los números salen piensan estrenarla en la primavera de 2015.
