11 atractivos hombres de serie con los que no celebrar San Valentín

Las series presentan personajes masculinos que por sus miradas, por su carácter, por su físico o por su éxito profesional derriten mujeres (y hombres, en el caso de los gays) a cada paso que dan.

Son hombres atractivos, seductores y, en ocasiones, encantadores. Pero lo que el transcurso de los capítulos nos ha enseñado es que se trata de hombres con los que una relación nunca termina siendo una buena idea. Son tóxicos.

Ni una relación ni una pasional cita de San Valentín. Son como la peor de las drogas: basta con probarlos para querer repetir… y ahí se entra en la espiral de autodestrucción con estos chicos.

Ha sido complicado, pero he aquí una selección de los hombres de serie (en emisión) con los que, en ningún caso, debes plantearte una quedad en un romántico 14 de febrero.

Ray Donovan ('Ray Donovan')

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Dicen de los Donovan que son Los Soprano de Sunset Boulevard. Quizá es mucho decir. Pero si Tony Soprano nunca hubiera sido una buena pareja de San Valentín -no solo por el físico-, en el caso de Ray (Liev Schreiber) se puede decir exactamente lo mismo. Tipo duro donde los haya es capaz de estrangular a cualquier por defender los intereses de su familia. Los sucios asuntos en los que siempre anda metido y su tendencia a la infidelidad no hacen de él un hombre del que esperar un ramo de rosas. Eso sí, suele enmendar su fallos como pareja a base de tarjeta de crédito.

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Sherlock Homes ('Sherlock Holmes')

Todo el mundo quiere a Benedict Cumberbatch y todos los seriéfilos adoran su Sherlock Holmes (como agua de mayo se esperan sus nuevos episodios). Pero este personaje no es el más recomendado para quedar con él en San Valentín. Primero porque perderá todo interés en una mujer entregada a tan comercial fecha del calendario. Segundo porque hay muchas posibilidades de que Sherlock se quede en casa con su opio y su violín en lugar de acudir a la cita. Y tercero porque, en el improbable caso de que acuda a la cita, es bastante probable que la chica acabe tirándole a la cara la copa de vino por alguno de sus impertinencias.

Don Draper ('Mad Men')

Es el galán por excelencia de Madison Avenue. Interpretado por Jon Hamm, el protagonista de la serie 'Mad Men' ve cómo las mujeres se rinden a sus pies. Más allá del físico, Draper es el ejemplo de hombre que desprende seguridad, éxito y testosterona a cada paso que da. Sin embargo, no son buenos tiempos para este crack de la publicidad. El alcohol no le sienta demasiado bien y tampoco es un seguro de fidelidad en una relación. Quien apueste por él, terminará llorando.

Will Gardner ('The Wood Wife')

Interpretado por Josh Charles, es otro exitoso tipo dentro de su mundillo profesional: la selva de los tribunales estadounidenses. Es un lobo con piel de cordero, un excepcional abogado que vive para y por su profesión. No es un mal tío, conoce el valor de la amistad. Desde que la conociera en la universidad, ha vivido enamorado de Alicia Florrick, la esposa del fiscal del Estado y también compañera en el bufete. Mala combinación. De Will le dijeron a Alicia que se trata de un hombre que siempre termina decepcionándote. Es uno de los solteros de oro de Chicago. Con esa carta de presentación, mejor no quedar con él en San Valentín, ¿no?

Raylan Givens ('Justified')

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Un tipo duro. Es marshal (policía judicial) en el rural y complicado condado de Harlan, en Kentucky. Maneja la pistola con total precisión y rapidez y su estilo texano, siempre con sombrero. Es un buen amante, un hombre capaz de enamorar a cualquier mujer que se cruce por su camino sin ni tan siquiera buscarlo. El problema es que Raylan (Timothy Olyphant) siempre encuentra alguna lío en el que meterse o alguna causa perdida que defender. El problema es que Raylan es otro de esos chicos que siempre acabará por decepcionarte.

Jon Snow ('Juego de Tronos')

Sí, Kit Harington, el actor que da vida en 'Juego de Tronos' a Jon Snow (Jon Nieve) es un sex simbol. Eso nadie lo pone en duda y menos las revistas de moda y tendencias. Pero esto no va del actor, sino del personaje. Su valeroso, leal, digno, caballeroso, intrépido y entregado Jon Snow tiene todo lo que cualquier mujer desearía. Pero su elevado sentido del deber, unido a su condición de cuervo (guardián del muro que ha jurado abstinencia sexual) no son buenos indicadores para que este chico constituya un buen plan de San Valentín. Eso sí, como ha demostrado en algún capítulo de la serie, Jon es un excepcional amante.

Peter Quinn ('Homeland')

Este espía de la CIA es un chico curtido en mil batallas. Con un físico atractivo, Peter (Rupert Friend) ha demostrado en cuantiosas ocasiones lo eficaz y letal que puede llegar a ser. Tantas misiones ha librado para la CIA que estas le han acabado pasando factura. Es un tipo anclado en una depresión, que se siente dentro de un agujero y con tendencia a emborracharse. Su atractivo se pierde tras unas copas.

James Gordon ('Gotham')

El texano Ben McKenzie se mete en la piel del inspector James Gordon, del cuerpo de policía de Gotham en la serie de Fox, precuela de la historia que todo el mundo conoce de Batman. Por físico puede tratarse de los mejores candidatos que ofrece actualmente el mundo de las series para concertar una cita de San Valentín. Pero su decidido objetivo de acabar con la corrupción en Gotham y de encontrar a los asesinos de los Wayne le convierten en un hombre casado con su trabajo y con su deber, muy al estilo de Raylan Givens. Posee el encanto que da su sarcástico y peculiar sentido del humor (a veces parece inglés), pero cuando te deje plantada o cuando una organización criminal te secuestre por su culpa ya no encontrarás a James tan atractivo.

Lucious Lyon ('Empire')

Un hombre con mucho flow y mucho dinero. Creció en las calles, rodeado de delincuentes. El hip hop le aupó al estrellato y el dinero empezó a entrar en los bolsillos de Lucious (Terrence Howard). Levantó su discográfica y se ha transformado en ese hombre que ama su imperio musical por encima de todo. De esos hombres ataviados con caros ropajes a los que hay que recordarles sus orígenes. Puede ser cortes y pasional en las distancias cortas, pero su ambición destrozaría cualquier relación con él.

John Thackery ('The Knick')

En esta lista de hombres tan atractivos como tóxicos no podía faltar un médico. El doctor John Thackery (Clive Owen) es todo un portento en su campo. Una de las eminencias médicas más respetadas y admiradas de la sanidad de inicios del siglo XX. Su adusto carácter y su frialdad provocará que haya tantas mujeres que lo odien como que lo amen. El problema para quienes se sientan atraídas por él, como pasa con alguna enfermera, es que se trata de un tipo con un especial magnetismo hacia todo lo decadente y perjudicial: drogas, peleas, obsesión por el trabajo… En su hospital, Knickerbocker Hospital, hay doctores que supondrían una mejor elección.

Patrick Murray ('Looking')

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Decir que Patrick Murray (Jonathan Groff) no constituye una buena opción para San Valentín es que muchos de los fans de este chicho de la serie gay de HBO abandonen automáticamente la lectura de este artículo (por eso va al final). Guapo, cariñoso, fornido, alto… ¿A qué chico homosexual no le gustaría tener un tórrido romance con Patrick? La pega es que con Patrick lo tórrido y pasional puede derivar en el empalagamiento supremo. Es excesivamente romántico, se come la cabeza por cada relación y necesita continuos mimos de su pareja. En San Francisco y en 'Looking' hay mejores opciones.