'Los nuestros', el lastre de querer llegar a "un amplio abanico de público"

Telecinco estrena este lunes en prime time la miniserie 'Los nuestros' en una apuesta que entraña el riesgo de llenar de metralletas y uniformes militares la pequeña pantalla en horario de máxima audiencia; un género -el bélico-, que escasea en ficción televisiva.

'Los nuestros' podrían ser una buena oportunidad para el espectador de consumir esa otra ficción que no se suele ver en prime time, esas series de nicho cuya premisa de partida no es calar en todo tipo de espectador. Pero no lo es.

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Telecinco presenta un producto que se desdibuja en una innecesaria historia de amor -desamor- que, cómo no, tiene como protagonistas a los mismos personajes que protagonizan la ficción, Hugo Silva y Blanca Suárez.

La interesante proposición de contar un rescate militar de dos niños españoles secuestrados por terroristas salafistas en Mali queda empañada por excesivas incursiones a un pasado personal de sus dos protagonistas; él, un capitán de un grupo especial de operaciones del Ejército y ella, una de las mejores tiradoras de precisión. Será un gustazo -y probablemente una sorpresa- para el espectador ver a una actriz tan dulce y elegante como Blanca Suárez tomar el fusil y disparar sin pestañear al objetivo designado. La desazón provendrá del hecho de que, al menos en el primer episodio, son bastantes más las escenas de la Blanca Suárez mujer que carga con el peso de una relación extramatrimonial con el personaje de Hugo Silva.

Mucha telenovela entre las balas y la tensión de una secreta misión de rescate militar que conforman un mediocre guion y que seguro que ha dejado satisfecho a más de un directivo de Mediaset que verá en esa innecesaria relación amorosa la clave para que esta serie lo borde en share. Posiblemente sea así y 'Los nuestros' se estrene con un buen dato de audiencia, pero los artificiosos trucos de guion para llegar a más espectadores, para dar mascadito el argumento y para presentar una situación más cercana a como el espectador medio la imagina que a como es en realidad, no hacen más que estropear una producto que también tiene sus cosas buenas.

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'Los nuestros' es una ficción visualmente muy potente que ha sabido recrear y rodar bien los momentos de mayor acción. Mantiene la incertidumbre sobre el resultado del rescate y merece un elogio al rigor con el que aborda todo lo tocante a lo más estrictamente militar, en parte, porque esta fue condición necesaria para hallar la colaboración del Ejército.

Salvador Calvo ('Hermanos', 'Niños robados') vuelve a tocar la tecla oculta para conseguir meritorias interpretaciones de un reparto cargado de rostros mediáticos. Consigue obtener la cara más cruda de Blanca Suárez, logra que Hugo Silva -por momentos- esté eficiente, Álvaro Cervantes continúa con su progresión, Antonio Velázquez parece recién llegado de Irak y nadie que no lo conociera pondría en duda que se trata de un avezado boina verde. Daniel Grao o Pedro Casablanc sacan con mucha soltura pequeños personajes que marcan diferencias. Tristán Ulloa y Laia Marull, angustiados y desesperados padres de los niños secuestrados, son de lo mejorcito que ofrece la serie.

No termina de encontrar el tono del suyo Marina Salas, que interpreta a una legionaria demasiado artificial. Para olvidar el sargento al que da vida Luis Fernández, entre voces y aspavientos.

Cuando se piensa en todos aquellos aspectos evitables cuya incursión lastra esta miniserie es complicado no recordar las palabras que Pepa Sánchez-Biezma (directora del Área de Producción de Miniseries de Mediaset) pronunció durante la rueda de prensa de presentación: "Cuando te planteas un proyecto tan arriesgado como éste te preguntas si interesará a un amplio abanico de público. Por ello, hemos tenido especial cuidado en encontrar una historia en la que la adrenalina y la emoción fueran de la mano".

Démosle emoción (entiéndase: amor entre protagonistas, sexo en camiones militares, padres coraje desgarrados) a una miniserie bélica, no vaya a ser que el espectador se asuste entre tanta explosión y tanto disparo y cambie de cadena.

Qué pena que 'Los Nuestros' no hayan sido lo que prometían ser. Qué pena que en Mediaset se haya "tenido especial cuidado en encontrar una historia en la que la adrenalina y la emoción fueran de la mano".