Las 3 series americanas en las que se mira 'La embajada'
Así será la serie de corrupción y política que prepara Antena 3 y cuyo rodaje empieza tras el verano
Atresmedia y Bambú Producciones son sabedores de que se juegan mucho con el proyecto que han decidido poner en marcha, 'La embajada': una serie que hable de poder, política, corrupción y pasiones.
Tanto en la cadena como en la productora que llevará a cabo este encargo entienden que lo complejo de 'La embajada' está en lograr seducir a un buen número de espectadores sin decepcionar a todos aquellos que esperan una gran serie política española. ¿Cómo lo conseguirá ese equipo formado por Ramón Campos, Gema R. Neira (Bambú) y Sonia Martínez (directora de Ficción de Atresmedia)?
Tres son las series norteamericanas en las que se mirará 'La embajada' para encontrar el tono deseado y no caer en unas tramas excesivamente sesudas que alejen al espectador medio ni en simplezas que rebajen el nivel de la serie.
'La embajada' se inspirará en 'House of cards', 'The Good Wife' y 'The Affair'. Esta es la idea que ronda la cabeza de los responsables del proyecto, según ha podido conocer la Cadena SER. Se están empezando a escribir los primeros guiones de una serie que prevé comenzar su rodaje en septiembre para establecer su probable fecha de estreno en el primer trimestre de 2016.
¿Todos somos corruptibles?
Este será el eje ante el cual giren los personajes de 'La embajada': en la vida política de un país hay corrupción y corruptos, pero ¿qué separa a alguien, hasta la fecha honrado, de empezar a formar parte de ese engranaje de corrupción? ¿Dinero? ¿Favores personales? ¿Cohecho? ¿Tráfico de influencias?
En los responsables de 'La embajada' existe la voluntad de bucear dentro del proceso de corrupción, ¿hasta qué punto un corrupto es consciente de su pecado cuando todo lo que le rodea le aboca a obrar así?
Muchas preguntas que espera poner sobre la mesa esta serie que tendrá como protagonistas a una pareja de mediana edad, el embajador de un país y su esposa. Como en 'The Good Wife', no se tocaría el tema de la política directamente, sino a través de la vida diplomática y de las ambiciones personales de cada individuo.
También como en la serie de CBS, una relación extramatrimonial empezará a abrir un hueco entre esta pareja. Ella se verá en la encrucijada de, por un lado, cargar con la culpa de haberle sido infiel a su esposo, el embajador, sospechando que él también mantiene una aventura con otra mujer; por el otro lado, comprobará que su marido anda metido en asuntos turbios que le podrían ayudar en su carrera política. Entre medias, el secretario del embajador, el hombre con el que ella vive el affair.
El partir de una infidelidad, presentar un matrimonio que se oculta parte de su vida privada (el espíritu 'The Affair') puede ser la clave para que el público más reacio a engancharse a una serie de enredos políticos muerda el anzuelo. Una vez se identifiquen con los personajes y entiendan sus motivaciones, les dará igual si la serie se ambienta en un escenario político, de bodegas de vino o del negocio de la moda.
Actores consagrados
Pese a que el proyecto se encuentra aún en fase de escritura de guiones, ya se han barajado algunos nombres para encabezar el reparto de la serie.
Como suele ser habitual en las ficciones de Bambú, el elenco mezclará actores de gran relieve y experiencia con caras más mediáticas. También contará con intérpretes aparecidos en otras series de esta productora, otro sello inequívoco de la casa.
En lo que sí se pondrá especial cuidado es en elegir al actor y la actriz que encarnarán al matrimonio protagonista de esta ficción que, en principio, contaría con 13 episodios. Atresmdia y Bambú quieren para estos dos papeles intérpretes con nombres y talla.
La esperada serie sobre política española no será pues ni 'House of cards', ni 'Borgen', ni 'El Ala Oeste de la Casa Blanca'. Quizá ni tan siquiera se enmarque en España y, muy probablemente, no se mencionen nombres de partidos, sino que utilizarían la fórmula de "el partido", dejando a la libre interpretación del espectador cualquier asociación con la realidad.
Es el precio que hay que pagar cuando se prepara una ficción para una cadena generalista que espera mantener una audiencia de más de 3,5 millones de espectadores.
Concesiones que, si bien van en perjuicio del producto, son comprensibles si no atentan contra la inteligencia del espectador buscando trucos fáciles para captarlo. Mezclar elementos de 'The Good Wife', 'The Affair' en una serie de ambiciones, política y poder es abrir un abanico de posibilidades. Lo elogiable es saber aprovechar brillantemente esas posibilidades sin caer en el culebrón.
No sirve de nada fabricar una serie bajo premisas de ficción para cable si donde se va a emitir es en un canal generalista, pues demasiado corto sería su recorrido en parrilla. El cementerio de las series olvidadas está lleno de grandes y buenas ficciones que nunca tuvieron en cuenta dónde iban a ser emitidas y cuál podría ser su público.