Noemí de Miguel: “La ambición tiene que dejar de ser una palabra negativa”
La presentadora de CANAL+ Deportes reflexiona sobre el actual papel de la mujer en televisión y la sociedad
Madrid
Algunas de las mujeres más influyentes en la sociedad española provienen de la televisión. Son auténticos iconos para sus cadenas, referentes para todo tipo de profesionales y espejos en el que mirarse para millones de ciudadanos.
A sus capacidades unen la fuerza de la imagen que da la pequeña pantalla para despertar en el espectador confianza, credibilidad, familiaridad, cercanía… Hoy, la presencia de la mujer en el mundo y negocio de la televisión se conforma como pilar fundamental.
Sin embargo, informes y estudios de diferentes consejos audiovisuales repartidos por todo el territorio nacional alertan de que, si bien mujeres y hombres han alcanzado una cierta igualdad en lo que se refiere a la composición de las plantillas en este medio, lo cierto es que sigue habiendo una brecha importante entre el número de mujeres que aparecen delante de una cámara y el de hombres. Tampoco mejora la relación si se analiza en los puestos directivos.
La Cadena SER ha reunido, en este Día Internacional de la Mujer, a 11 rostros femeninos representativos de las principales cadenas de televisión españolas para que reflexionen y compartan su opinión sobre el actual papel de la mujer dentro del mundo televisivo y de la sociedad española, así como sus obstáculos y sus retos.
Noemí de Miguel, presentadora de CANAL+ Deportes
¿Cómo ves el rol que juega la mujer en la televisión de España? ¿Y en el marco de la sociedad española?
Es una carrera de fondo, se sabía desde el principio. Y aunque los relevos han ido llegando y se ha ido progresando adecuadamente, todavía queda mucho por hacer hasta llegar a la meta. Hay mujeres que presentan informativos, muchas. Eso significa que tienen credibilidad, un valor fundamental. Pero se reduce su número si miramos a las estructuras directivas de los medios de comunicación. También por el hecho de que se trata de estructuras que, aunque vivas, no cambian con tanta frecuencia como un programa estacional puesto en antena. Y en la sociedad española sucede algo similar. Si la publicidad es reflejo de estudios previos de la realidad en la calle, sus modelos puede que no hayan variado tanto como debería en las últimas décadas.
¿Cuáles son, a tu juicio, las principales zancadillas que se encuentra la mujer en televisión? ¿Y en la sociedad?
Una de las principales zancadillas de las mujeres son las que se ponen ellas mismas. Aún hay trazas (cada vez menos en las nuevas generaciones afortunadamente) de una educación que conducía a la mujer a ser una esforzada trabajadora que tenía que sentirse afortunada por llegar a alcanzar un "trabajo digno". Pero la ambición tiene que dejar de ser una palabra negativa. No lo es en esencia. Sólo representa aplicar las mejores cualidades de uno mismo en su trabajo para aspirar a aquello a lo que quiera aspirar. Sin limitaciones de género.
Convertir la progresión profesional en una competición malsana en la que proteger a toda costa un estatus sí es negativo. Querer tener un puesto adecuado al esfuerzo y el talento y una remuneración justa es lícito, pero no una realidad extendida. En el marco de una crisis todo se complica aún más.
¿En televisión se prima y/o se resalta, con demasiada frecuencia, el atractivo físico de una mujer por encima de sus capacidades profesionales?
No creo que se resalte el físico por encima de la capacidad profesional con frecuencia en la televisión española. Pero sí que en la lista de "otras cualidades" que un buen profesional tiene que tener, el del físico aparece antes en la de la mujer que en la del hombre.
En España, ¿qué retos tiene por delante la mujer en televisión? ¿Y en la sociedad?
Que no se le cuestione. Que juzgue el porqué de la posición que ocupa. Pero es algo tan enraizado que te das cuenta que sucede incluso cuando alguien quiere elogiarte. Ni una, n dos, ni tres veces sino muchas más me han dicho: "sabes mucho de fútbol siendo chica". Lo de "saber de fútbol" sería otro debate. No es una realidad, sino que cada día se observa y aprende. Pero la parte de "para ser chica", que el género sea una condición no puede seguir mucho tiempo estando ahí. No hay ninguna influencia del género en la capacidad intelectual y, por tanto, tampoco para ser capaz de analizar un partido de fútbol, una obra de arte o diseñar un coche. Cuando trabajas en un medio público estás expuesto al juicio del público y algo implícito en tu contrato, pero expones que lo hagas mejor o peor a su juicio, no que para ser hombre o mujer lo hagas mejor o peor.
No puede seguir llamando la atención que una mujer esté al frente de un banco, de un periódico o sea científica. Está bien ser conscientes de que, seguramente, les ha costado más esfuerzo que si se tratara de un hombre llegar ahí. Pero debería dejar de sorprender. En el cara a cara hay muy poca desigualdad, por eso hay que encontrar la manera de hacerlo algo cercano e impedir que siga amparado en vocabulario popular, imágenes que por el uso se han normalizado y comportamientos hechos costumbres.
¿Qué mujer(es) te ha marcado a nivel personal y a nivel profesional?
Precisamente no he seguido un referente femenino, sino que me he inspirado en valores de distintos seres humanos a lo largo de todos estos años y casi siempre han sido muy cercanos. Aprecio que Mari Carmen Izquierdo o María Escario abriesen esa puerta del periodismo deportivo a las que nos hemos ido 'colando' después. Me ha marcado siempre la capacidad de trabajo de mi madre y mi abuela. Pero también el de mi padre y sus profundos valores humanos. La tolerancia de mi otra abuela, huérfana por la guerra, y orgullosa de una democracia que usó al gusto.
- ESPECIAL 'LA MUJER EN TELEVISIÓN'