Los jueces de la Liga

La pelea por la Liga no tiene descanso. La última jornada ha devuelto al Barcelona al liderato de la clasificación, pero su ventaja respecto al Real Madrid es de solo un punto. Los azulgranas perdieron el primer puesto en la jornada 10 y lo recuperan en la 28, a falta de solo 12 encuentros que, uno detrás de otro, prometen ser decisivos.

Porque aunque el Clásico parece el choque en el que los dos equipos se jugarán la Liga, tanto el Barcelona como el Real Madrid todavía han de pasar duros obstáculos de aquí al final de la temporada. Y comparten muchos rivales. Concretamente, seis. Porque los dos equipos todavía tienen que visitar Balaídos, recibir al Almería, viajar al Pizjuán, recibir al Valencia, visitar al Espanyol y recibir al Getafe.

Dos de los equipos más en forma del campeonato, el Valencia y el Sevilla, pueden ser los encargados de decidirlos. De hecho, pueden empezar a hacerlo muy pronto, ya que el Barcelona será el primero que se enfrente a ellos. Lo hará en las jornadas 31 y 32, tres después del Clásico. En la primera, los de Luis Enrique visitarán el Pizjuán. En la segunda, recibirán en casa a los de Nuno.

Al Real Madrid eso le ocurrirá más tarde, en la recta final del campeonato. Porque su desplazamiento a Sevilla se producirá en la jornada 35, a cuatro del desenlace. Y el recibimiento al Valencia, en la 36.

Después de ese encuentro solo faltarán dos asaltos para que la pelea por el título termine. En ese momento, la mayor dificultad llegará para el Barcelona, ya que en la penúltima jornada comparecerá en el Calderón para medirse al Atlético, el equipo que le ganó la última Liga en su casa. Cuando el choque termine, al equipo azulgrana solo le quedará jugar en el Camp Nou ante el Deportivo.

Las dos últimas jornadas le deparan al Madrid un enfrentamiento en casa del Espanyol y en el Bernabéu ante el Getafe.

Para terminar de complicar la batalla, los dos equipos no solo deben atender al frente de la Liga en las semanas que faltan para que termine el campeonato. La Champions League puede someterles a un desgaste que también puede ser decisivo cuando el margen entre ambos es tan escaso.

La mejor demostración es que el Barcelona tendrá que jugar los dos partidos de cuartos justo después de sus encuentros ante el Sevilla y el Valencia. Lo mismo le pasaría al Real Madrid si se clasificara para las semifinales. La ida vendría justo después del Pizjuán y la vuelta, inmediatamente detrás de recibir al equipo de Nuno.