El chinchón tuvo la culpa de la borrachera de Fernando Arrabal en TVE
El intelectual explica en 'Alaska y Segura', con show incluido, su famoso episodio del "milenarismo"
Madrid
Si la noche del domingo de laSexta es televisión de muchos quilates, la de los lunes en TVE es auténtica televisión de calidad; primero con la serie 'El Ministerio del tiempo', después con el espacio 'Los archivos del Ministerio' y, ya en el late, el programa 'Alaska y Segura'.
Todo un acierto por parte de TVE convertir este formato en un programa para el late night de su cadena principal tras ser un espacio de prime time en La 2 en sus dos primeras ediciones. Tras tres emisiones y audiencias al margen -anoche volvió a bajar marcando un 5,1% de share- se puede decir que con 'Alaska y Segura' el formato dirigido por Santiago Tabernero ha madurado completamente desde aquella primera edición con Mara Torres y Joaquín Reyes, mucho más enfocado al mundo de internet y las nuevas tecnologías.
'Alaska y Segura' es una late que lleva el sello inequívoco de la TVE de otros tiempos, de la buena TVE. Empezando por el equipo que hay tras las cámaras y concluyendo por el plató en el que se lleva a cabo, en los míticos Estudios Buñuel que pronto pasarán a mejor vida. La dirección del Ente público acierta al seguir confiando en este formato que, si bien nunca terminó de cuajar entre la audiencia -en La 2 tampoco presentaba unos datos excepcionalmente buenos-, sí que es un perfecto ejemplo de entretenimiento de calidad, sin vulgarismos, pero sin corsés.
Un buen ejemplo de todo ello fue el programa de este lunes que empezó con la visita de José Mota. El cómico manchego fue entrevistado por Alaska y su buen amigo de Santiago Segura, mostrando una complicidad que caló entre los espectadores y que sacó el lado más divertido de un Mota cuyo humor es tan amado por unos como incomprendido por otros.
A la entretenida entrevista con Mota le siguió la visita de Fernando Arrabal. El célebre escritor no dejó indiferente a los espectadores del programa que, pocos minutos después de su aparición en plató, ya habían convertido su nombre en trending topic. Y es que Arrabal, a sus 82 años, sigue siendo una fuerza de la naturaleza incontrolable delante de una cámara. Intentaba Alaska reconducirlo tras cada pregunta, solicitándole respuestas breves, pero Arrabal se levantaba y vagaba por todo el plató buscando una cámara que no hallaba para explicar sus teorías y experiencias vitales, yéndose por los cerros de Úbeda tras cada pregunta de Alaska.
En un determinado momento, Segura le preguntó por su famoso episodio de 1989 en el programa 'El mundo por montera', presentado por Sánchez Dragó y en el que Arrabal, visiblemente embriagado, empezó a hablar del "milenarismo" dando lugar a un espectáculo que ha trascendido de generación en generación como uno de los momentos más divertidos y espontáneos de la historia de la televisión en España.
"Gran momento, gran momento", comentó anoche en 'Alaska y Segura' Arrabal tras ver el vídeo y explicó cómo fue todo aquello: "Yo no sabía beber vino, era ridículo entre mis amigos. Y cuando llego a la televisión, como ahora, tengo una sed tremenda… pero nunca hay agua. Y llegué y le pedí a Dragó agua. Con esa sed tremenda que se tiene en las televisiones españolas. Hoy mismo me estoy muriendo de sed", bromeaba Arrabal mientras zascandileaba por el plató ante la atenta mirada de Alaska, Segura y Sánchez Dragó que era el otro invitado.
"Entonces pido un vaso de agua y me dan un vaso grande. Comienzo a beberlo y me doy cuenta de que no es agua, que es algo tremendo: es chinchón. Pero tengo tanta sed que me lo bebo entero". Así explicó Arrabal su famoso episodio del "milenarismo" en TVE. "Esa noche, muerto, me llevaron al Hospital Clínico de Madrid para vaciarme el estómago".
Después fue el turno de Fernando Sánchez Dragó que explicó su versión "de lo que realmente sucedió". Dragó bromeó con la libertad de aquella TVE "en la que sucedían cosas tan normales como que un amigo se emborrache en tu casa".
"No le dimos ningún vaso lleno de chinchón. No nos hemos explicado aún hoy ninguna de las personas que estábamos en el programa cómo él [Arrabal], hábilmente, se hizo con una copa o dos de chinchón", contó entre risas Dragó. "Es bajito y a él le hace el mismo efecto una copa de chinchón que a mí tres".
Explicando el caos del programa, Dragó cuenta que justo tras concluir la emisión en directo, Arrabal cayó desmayado, motivo por el cual tuvieron que llevarle hasta el hospital y allí practicarle un lavado de estómago, pues el alcohol del chinchón hizo un mayor efecto al mezclarse con una medicación que en aquel momento tomaba el intelectual melillense.
Dos versiones, parecidas pero no iguales, de un suceso que es pura historia de la televisión y que, si pudo llegar a producirse fue únicamente por el espíritu de libertad que reinaba en aquella TVE, algo que tanto Dragó como Alaska recordaron.
'Alaska y Segura' es un programa actual que bien podría haber tenido lugar en aquella Televisión Española de finales de los 80… y eso es ya de por sí un gran elogio a este espacio producido por La Competencia.