El amor imposible de la periodista italiana Saluzzi y Fernando Alonso
Suspenden de sueldo y empleo a la popular periodista italiana Paola Saluzzi por llamar ‘pedazo de imbécil’ a Fernando Alonso

El piloto español, en el garaje de McLaren-Honda durante el GP de China. / DIEGO AZUBEL (EFE)

Roma
Paola Saluzzi, la que fuera el rostro amable de los deportes en la televisión italiana y enviada especial a los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992, ha sido suspendida de sueldo y empleo del informativo vespertino por sus comentarios ofensivos hacia el piloto asturiano Fernando Alonso.
La peliroja Saluzzi, fanática de la escudería Ferrari, afirmó en su cuenta de twiiter que “Fernando Alonso había recuperado la memoria y había recordado cuánto es arrogante, envidioso y pedazo de imbécil”.
El piloto asturiano, indignado, negó declaraciones a la cadena de televisión de Saluzzi, que tiene los derechos de transmisión de la Fórmula 1 en Italia y se prodigó en atenciones a la competencia, la red pública RAI, tras la carrera de Shanghái.
De nada le han servido a la periodista sus disculpas públicas. “Me equivoqué –dijo- y basta”. Pero basta, precisamente, le han dicho los directivos de su cadena, que la han enviado de vacaciones forzadas e indefinidas. La bella Paola Saluzzi, de 51 años, recién casada en secreto, en Nueva York, con el también periodista Gabriele Romagnoli del diario 'La Repubblica', se reconoció tan terca como su padre, de quien dice que heredó esta ‘virtud’. “Y como tifosa (aficionada) –añadió- no me gana casi nadie”.




