El PP aplaza tomar medidas contra sus diputados antiabortistas
Fuentes del Grupo Popular señalan que no se adoptará una decisión hasta que no finalice todo el trámite parlamentario de la proposición de ley de la reforma del aborto
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, junto al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, tras la votación sobre la reforma de la ley del aborto. / Javier Lizón (EFE)
Madrid
El Comité de Dirección del Grupo Popular no va a tomar ninguna decisión por ahora. Prefiere esperar a que termine todo el trámite parlamentario de la reforma del aborto para adoptar medidas y, por tanto, hasta que no se llegue al final no se sabrá si sus diputados radicalmente contrarios a la interrupción del embarazo serán o no sancionados.
El pasado martes se votó la toma en consideración de esta proposición de ley que pide impedir que las menores puedan abortar sin consentimiento paterno. Se aprobó con 184 votos a favor, 136 en contra y cuatro abstenciones. Uno de los votos en contra fue de la diputada conservadora, Eva Durán. Algo que a sus compañeros de partido sorprendió bastante. No así las abstenciones de José Eugenio Azpiroz, Lourdes Méndez, Javier Puente y Antonio Gutiérrez Molina. Era lo previsto y todos ellos, además, permanecieron en el Pleno.
Según el reglamento interno del PP se les puede aplicar una multa que va de los 100 a los 600 euros y para ello se valorará “el conjunto de las circunstancias”. Dicen que no es lo mismo que sigan en sus sitios a que se ausenten o que hagan aspavientos o declaraciones. Pero da igual porque eso no se va a abordar por el momento.
A muchos de sus compañeros de partido les llama la atención porque a Celia Villalobos sí se la sancionó. Y no en una sola ocasión sino en varias por romper la disciplina de partido. Una de ellas por negarse a votar en contra de la moción socialista que pedía paralizar la reforma que quería Alberto Ruiz Gallardón.
Pero fuentes populares nos explican que son cosas distintas, que se hacía porque no era una iniciativa de ellos y era una cuestión que, además, se abría y cerraba en el mismo día y no como esta. Porque recuerdan que, en este caso, hay todo un proceso por delante. De hecho estiman que podría estar listo para julio, pero no descartan que sea para septiembre.
En las filas populares creen que los diputados 'provida' han visto que son un sector minoritario y no tienen fuerza. Algunos cargos conservadores piensan que el Grupo prefiere enterrar la polémica. Otros, sin embargo, piensan que se les van a acumular los problemas y el desenlace puede ser “una bomba que les explote en plena cara”. Pero, de momento, desde el Grupo no quieren pronunciarse. Lo siguiente es que se abra plazo de totalidad con texto alternativo, también tiene que pasar por el Senado... Y así se gana tiempo.
