El PP activa su reforma electoral con el rechazo del PSOE y la Izquierda Plural
En el Partido Popular dicen que no quieren sacar adelante su iniciativa por mayoría absoluta pero reconocen que podría estar lista en tres meses y que ya tienen redactados los más de 40 artículos de la Ley Electoral que quieren modificar
Madrid
El PP insiste en su reforma electoral. Hoy Rafael Hernando, portavoz del Grupo Popular, ha anunciado que su formación llevará su propuesta al Congreso a través de una subcomisión, en el seno de la Comisión Constitucional. Los conservadores aseguran que no quieren que esta salga adelante por mayoría absoluta. Recuerdan que todos los retoques que se han hecho siempre en esta ley han sido por consenso. Pero reconocen que podría estar lista en tres meses y tienen ya redactados los más de 40 artículos que quieren modificar. Aunque saben que le haría un flaco favor a Rajoy porque sería de lo más impopular imponerla en vísperas de unas generales.
La iniciativa del PP establece que sea elegido alcalde el candidato que encabece la lista que obtenga un 35% de los votos y tenga una diferencia de cinco puntos sobre la siguiente candidatura. O bien tenga más de un 30% y más de 10 puntos de distancia sobre el segundo. Pero si al final, no se resuelve la situación, se recurrirá a la celebración de una segunda vuelta a la que se presentarán todos los partidos que hayan obtenido más de un 15% de los votos. Y después, ya sería investido alcalde con más del 40% de los votos o el que haya ganado con más de siete puntos de ventaja sobre el segundo.
El PP quiere que comiencen los trabajos y que las demás fuerzas políticas se retraten. Hernando ha recordado que Pedro Sánchez pospuso este debate hasta después de las elecciones de mayo y asegura que ahora “ya no se puede negar” a hablar de ello. Para Hernando se trata de evitar “situaciones chocantes" como las de algunos de los alcaldes que hoy gobiernan y que solo lograron un porcentaje de votos muy pequeño. Para ello ha puesto de ejemplo, el 16% en el caso de Pamplona o el 19 % de Las Palmas. Para el portavoz conservador lo que ocurre es que a los socialistas “no les gusta” tratar este asunto porque han favorecido “pactos de perdedores y acuerdos espúreos, cambiando las ciudades como si fueran cromos”.
Pero la oposición ya le ha mostrado su rechazo. El PSOE dice que no va a negociar nada hasta que no pasen las generales y consideran que Rajoy ha entrado en “modo pánico” ante “el miedo a perder la Moncloa”. Su secretario de política federal, Antonio Pradas, opina que es propio de “un Ejecutivo atemorizado”, de “muy poco rigor” y que “levanta la sospecha de que se hace de una forma partidaria” porque el PP puede obtener un resultado negativo en los próximos comicios. También desde la Izquierda Plural se ha denunciado esta iniciativa. A su portavoz, José Luis Centella, le ha parecido “todo un golpe institucional” y ha hecho una llamamiento a los municipios para que se rebelen.