Una agencia de modelos en la que solo se aceptan transexuales
Apple Model Management ha decidido hacerse con el monopolio de la representación de modelos 'trans' en Los Ángeles
Andrej Pejic, una de las modelos transexuales más conocidas. / Adam Berry (Getty Images)
Madrid
Cuando la androginia ya se ha asentado en el mundo de la moda, tanto en el caso de los maniquís como en el de la propia ropa, viene pisando fuerte la moda ‘trans’. La agencia Apple Model Management ha decidido crear una filial compuesta únicamente por modelos transexuales, hombres y mujeres. La empresa tiene previsto lanzarla en Los Ángeles, debido a las oportunidades que ofrece la ciudad para el sector.
La nueva agencia, que abrirá sus puertas este mismo verano, estará dirigida por Cecilio Asunción. Se trata del creador de What’s the T?, un documental que explora la vida de las mujeres transexuales, centrándose en su faceta como modelos a lo largo de la historia. De momento, Apple Model Management L.A ya cuenta con 6 modelos y ha dado a conocer algunos requisitos: alturas superiores a 1.73 metros para las chicas y de 1.83 metros para los chicos. Asunción afirmaba hace unos días para The Advocate que el éxito de un maniquí no depende de etiquetarlo por su sexo. Añadía que potencial de este colectivo nunca ha sido alcanzado ''por el estigma de la sociedad, en general, hacia la comunidad transexual’’. No obstante, se muestra optimista con el futuro.
La compañía encargada de su puesta en marcha ya es conocida por su carácter transgresor y pionero en el mundo de la moda. El año pasado se lanzaba a la apertura de una sede en Tailandia encaminada a la inclusión de los modelos transgénero del país. Y es que no se trata de una moda actual o pasajera. Desde hace décadas, se reivindica su introducción y aceptación en el mundo de la moda. Caitlyn Jenner es una de las transexuales más conocidas del mundo, una fotografía suya se compra por 250.000 dólares (unos 226.000 euros). Su portada en la revista Vanity Fair se convirtió en un éxito mundial.
Sin embargo, el camino ha sido duro para las pioneras. April Ashley, la primera en encabezar una portada de Vogue, sufrió el rechazo del mundo de la moda al descubrir su cambio de sexo. Una noticia publicada en el Sunday People , difundida por un conocido, intentó hundir su vida. No fue hasta hace tres años cuando recibió la Medalla del Imperio Británico en reconocimiento a su lucha.
