Ibiza gana la batalla: no habrá 'Ibiza Shore'

Madrid

"Quiero agradecer desde el Consell Insular la colaboración de todos los sectores que se han implicado desde un primer momento en este rechazo unánime a este tipo de programas". Estas han sido las palabras que ha pronunciado este viernes Vicent Torres, presidente del Consell de Ibiza tras conocerse la noticia de que MTV renuncia a seguir adelante con la grabación del reality 'Ibiza shore'.

La fuerte oposición de autoridades locales, así como de vecinos y empresarios, ha provocado -según adelanta la agencia EFE- que tanto la cadena como la productora del formato hayan desistido en un intento de convertir en Ibiza en la nueva parada de la franquicia Shore en España tras haber aterrizado en 2012 en Gandía.

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Fuentes del Consell consultadas por la Cadena SER afirman que se produjo una reunión con la productora de 'Ibiza Shore' (Magnolia) para hacerles llegar de manera oficial el rechazo del Consell a la grabación de este reality en la isla.

Además, estas fuentes explican que el Consell aprobó en pleno una declaración de rechazo y pidió el apoyo del sector turístico de la isla para poner en marcha una movilización contra 'Ibiza Shore'.

Desde el Consell valoran como "muy positiva" la decisión de MTV y de la productora de abandonar la isla y agradecen a todos los vecinos de la isla su implicación en la causa.

'Ibiza shore' tenía previsto iniciar su grabación a mediados de este mes de agosto hasta mediados de septiembre. Ya habían salido a la luz algunos de los participantes que podrían formar parte de esta segunda edición shore española (los ex de 'Gandía Shore' Abraham y Arantxa).

"Debido a una serie de circunstancias que no podemos controlar, el próximo programa de la franquicia Shore no se grabará en Ibiza", han asegurado sus responsables a la Agencia EFE explicando que llevarán su producción "a otro increíble destino", aún por determinar.

Ibiza le ha ganado la batalla a la tele-realidad de garrafón. Queda la incógnita de saber si este hecho sienta precedente y lleva a otras localidades españolas a mostrar un firme rechazo a la grabación de un programa de estas características donde todo se reduce a sexo, discusiones y el exceso de alcohol entre unos participantes con un desmedido culto al cuerpo.