Euclidis Tsakalotos: "Algunos países querían una derrota política de Syriza para no animar a los españoles"
Entrevista con el candidato de Syriza y exministro de Finanzas griego
Atenas
El municipio de Halandri, absorbido por la gran Atenas y convertido en casi un barrio de clase media popular de la capital, es el ejemplo de sitio en el que Syriza ha hecho fortuna en los últimos años. Desde 2014 gobierna una coalición en la que está incluida la propia Syriza, junto a otros movimientos de izquierdas y ecologistas y en las pasadas elecciones el partido de Tsipras fue el más votado. Es terreno fácil para el pequeño mitin popular que da uno de los hombres más destacados del gobierno ya dimitido de Syriza, quien ocupara la cartera de Finanzas tras la salida de Varoufakis, Euclidis Tsakalotos.
Con un tono muy próximo y cordial, sin apenas presencia del 'aparato de seguridad' habitual con otros políticos, nos invita a acompañarle a un rincón más silencioso, preocupado por que la música del acto a punto de empezar nos moleste. "Entiendo la frustración de muchos de nuestros votantes, pero algunos países miembros [de la Unión Europea] querían que Syriza sufriera una derrota política para no animar a los españoles, los portugueses o los italianos. Parcialmente lo han conseguido pero creemos que se puede sacar lo mejor de este acuerdo".
En enero Syriza pedía el voto para acabar con la austeridad. Ocho meses después, ¿para qué le piden el voto a los griegos? "Les pedimos que den otra oportunidad a un gobierno de izquierdas. Alcanzamos un acuerdo dificil con los acreedores; hay dificultades pero también oportunidades, porque hay muchas reformas dentro del acuerdo de rescate en las que la gente puede confiar en un gobierno de izquierdas que se preocupa por la redistribución de la riqueza o la crisis humanitaria, la reforma del estado, la evasión fiscal... Y los partidos del régimen anterior, tanto a la izquierda como a la derecha, no han mostrado ninguna voluntad o capacidad de hacerlo".
Este jueves una encuesta de Metron para la web Parapolitika.gr vuelve a poner a Nueva Democracia en cabeza, por apenas un 0,6% frente a Syriza (31,9 frente a 31,3) pero la mayoría de encuestas dan a su partido como vencedor, aunque sin la mayoría absoluta que Alexis Tsipras buscaba al convocarla. Ante la aparentemente inevitable necesidad de buscar el apoyo de otros partidos, ¿cuál sería su preferencia? "Eso tendrá que esperar hasta que el lunes el partido cumpla con el procedimiento democrático y lo discuta, pero es difícil aliarse con aquellos partidos que han hecho su fortuna gracias a la evasión fiscal y el estado clientelar. Mucha gente cree que el sector público griego es ineficiente ante la evasión fiscal, pero la verdad es que para quienes quieren usarlo políticamente es muy eficaz".
Una de las razones por las que nuestro partido es Proeuropeo y proeuro es porque creemos que estamos ante crisis económica mundial, climática y geopolítica. Y volver al estado nacional no va a solucionar nada. El clima, la deuda o las migraciones son cosas que necesitan una solución internacional. Sería un buen comienzo si las grandes potencias deberían empezar por solucionar la situación en Palestina o Siria, en lugar de tomar parte por uno de los bandos para que continúe. Las guerras no son algo que suela ayudar, la verdad. Vivimos en una Europa de bajas expectativas. En los viejos tiempos, Billy Brandt habría salido con un plan global para el Sur, habría buscado movilizar a la izquierda, a la solcialdemocracia y al centro y les habría dicho que hay que solucionar el problema de la pobreza en el Sur. Ahora echamos de menos esa visión. Puede poner toda la policía y todas las verjas que quiera, pero cuando la gente tiene desesperación, no hay frontera que les pare".
Muchos dirigentes conservadores responsabilizan a Grecia por esta situación, les acusan de haber abierto sus fronteras. "Bueno esas personas deberían ir a Siria. Y si están allí un par de días, se darán cuenta de por qué esta gente huye. Y no hay fuerza que pueda pararlos, a no ser que sugieran que les disparemos en nuestra frontera. Pero si ustedes saben cómo son nuestras fronteras, con cientos de islas, no es un tema policial. Es un tema humanitario y geopolítico, es un tema de lograr la paz y el desarrollo y Europa debería hacer mucho más en este tema".