El Atlético define su línea ofensiva
El Calderón espera la decisión de Simeone sobre los hombres de referencia en ataque después de la gran actuación de Torres y Correa en Ipurúa. Koke es la única baja en los rojiblancos

Correa celebra su gol al Eibar. / VINCENT WEST (Reuters)

Un 0-2 contra el Galatasaray en la competición europea y otro 0-2 en Ipurua frente al Eibar han sido la respuesta del Atlético a su derrota de hace diez ante el Barcelona (1-2), el único borrón del inicio del curso del conjunto del argentino Diego Simeone, con su portería a cero en cuatro de sus cinco duelos oficiales hasta ahora.
A tres puntos del líder, el Atlético de Madrid tiene ante sí un partido básico, en el que el triunfo asume una transcendencia altísima para reducir o contener las diferencias respecto a la primera posición, pero también para instalarse cuanto antes dentro del podio, con la tercera posición marcada como un objetivo prioritario para el club.
También es una prueba de resistencia y plantilla para el Atlético, que afronta su cuarto encuentro en once días, pero que ya demostró todas sus variantes ofensivas el sábado. Primero, Simeone apostó por el colombiano Jackson Martínez y el argentino Luciano Vietto y después por su compatriota Ángel Correa y Fernando Torres.
Entre ambos, más la entrada de Óliver Torres, resolvieron el encuentro, con dos conexiones entre Correa y Fernando Torres, que intercambiaron goles y asistencias para el 0-2 en Eibar, y que abren el abanico de posibilidades para el ataque en el duelo de este martes, también pendiente de la zona que ocupe Antoine Griezmann.
El internacional francés es fijo en la alineación inicial, bien por una banda, como en los dos partidos más recientes, o bien en ataque, donde jugó en las tres primeras jornadas de Liga, con lo que entre Jackson, Vietto, Torres y Correa saldrán previsiblemente dos puestos más del once, a la espera del entrenamiento de esta tarde.
De momento, el Atlético sólo tiene una baja: Koke. Un hombre indiscutible en el esquema rojiblanco y una ausencia relevante para el equipo, que ha repartido victorias y derrotas, tres de cada una, cuando el centrocampista no jugó el pasado curso ya fuera por lesión o sanción. Óliver Torres, en principio, le suplirá en el once.
Ánimos renovados en Getafe
Mientras, el Getafe vive envuelto en un aura de optimismo moderado después de acabar con la mala racha de tres derrotas consecutivas en Liga. Tras perder contra Espanyol, Granada y Athletic, la victoria en la última jornada frente al Málaga por 1-0 acabó con una crisis de resultados que alivió a la plantilla y al cuerpo técnico del conjunto azulón.
El técnico Fran Escribá ya no mira al resto de equipos desde lo más bajo de la clasificación y, aunque es consciente de que el Getafe tiene que mejorar su juego, de momento se conforma con obtener resultados para despegar y olvidar un inicio de curso errático.
Es consciente de que encadenar otra victoria no será nada fácil por el escenario al que tendrá que enfrentarse. El estadio Vicente Calderón no es un campo propicio para los intereses del Getafe. Los datos históricos así lo demuestran: en los once enfrentamientos ligueros anteriores, el club que preside Ángel Torres logró solo dos victorias y dos empates. El resto fueron siete derrotas y alguna escandalosa como el 7-0 del curso 2013-14.
Pero del pasado no se vive y Escribá intentará dar la sorpresa con un grupo que tiene la moral alta por la victoria frente al Málaga. Tendrá mucho donde elegir porque solo tiene a un jugador lesionado, Roberto Lago, que se perderá el encuentro por culpa de una pequeña rotura en el sóleo de su pierna izquierda que le impidió terminar el último encuentro.




