La ola de refugiados hacia Europa continuará, según la OCDE
“Es necesario una gran acción coordinada internacional ", ha señalado el secretario general de la OCDE, Ángel Gurria, al presentar el nuevo informe sobre los flujos migratorios

Refugiados en la estación de ferrocarril en Hegyeshalom, Hungría / Csaba Krizsan (EFE)

París
La masiva llegada de refugiados a Europa no es previsible que disminuya. La guerra en Siria y el desmoronamiento de Libia “son retos auténticos desafíos para la comunidad internacional”. La OCDE advierte en este nuevo estudio sobre los flujos migratorios que la presión migratoria procedente de Irak y Afganistán seguirá también siendo alta, al tiempo que hay riesgos de inestabilidad en el Líbano y Ucrania.
Además, la pobreza y demografía continuarán impulsando a las poblaciones subsaharianas a desplazarse hacia Europa y la violencia en Eritrea impulsa a sus habitantes a huir. Y dentro del continente europeo, los flujos procederán de los Balcanes, especialmente de las comunidades Roma. La OCDE indica que olas de migración muy fuertes se produjeron en otras zonas del mundo. Pero considera un fenómeno único la entrada de 800.000 personas en un solo año en Alemania, lo que supone más del 1% de su población.
Pese al ingente esfuerzo que puede llegar a suponer, la Organización de países más desarrollados es optimista: “Incluso si en el pasado muchos países europeos se vieron en un principio sorprendidos (por la emigración), la situación pudo superarse y los emigrantes que se quedaron fueron integrados”. La mayoría de los países “se han beneficiado económicamente al menos a largo plazo“ del flujo migratorio.
La llegada de menores no acompañados es otro reto para Europa, pues en muchos países los niños no entran el sistema de demanda de asilo. Y en todo caso deben ser integrados en familias de acogida, necesitan supervisión y escuelas lo que no es fácil en países con crisis económicas como Grecia.
La OCDE pone algunos ejemplos de otros éxodos que fueron superados, como el que tuvo lugar desde los países del Este tras la caída del telón de acero. En España la población proveniente del extranjero se multiplicó por tres en sólo nueve años y ya incluso antes de esta nueva ola de emigración Alemania es el país, tras EEUU, con un mayor porcentaje de población de origen extranjero. En otros países como “en Francia, Reino Unido o Suiza, el número de refugiados no ha crecido de manera significativa”, señala el organismo.




