Un ídolo caído en Malasia
El piloto italiano ha protagonizado una polémica acción en Sepang que ha acabado con Márquez en el suelo
Madrid
Valentino Rossi es, posiblemente, el mejor piloto de la historia. Es rápido, talentoso, astuto, valiente y tiene mucho carisma. Su legión de seguidores es inmensa a lo largo de todo el mundo. Su figura provoca una adhesión casi inquebrantable ante cualquier error o lance de carrera. Sin embargo, aunque algunos devotos del 46, con una venda en los ojos, sigan defendiéndole, lo de hoy en Malasia no ha sido un incidente más. Rossi ha tirado a Marc de la pista. Es así de claro. Ha sido intencionado, sucio y antideportivo. Ha jugado con la integridad de un compañero y luego le ha acusado de que "sólo quería causarme problemas". Se mire por donde se mire, lo que ha hecho es inadmisible
El jueves, en la rueda de prensa, el italiano intentó provocar a Márquez y Lorenzo acusando al de Honda de favorecer al de Yamaha. Lo único que logró fue enfadar y extramotivar a ambos. La batalla psicológica que él empezó se ha cobrado una víctima inesperada: el propio Rossi. Marc ha salido hoy con pinturas de guerra y ha habido vueltas de tensión al límite con Rossi. Eso ha calentado en exceso a Rossi, ha perdido la cabeza y ha echado de la pista a un compañero de forma rastrera, sacando incluso un pie del estribo para empujarle. Incluso el siempre prudente y neutro Pedrosa ha reconocido que "la pierna sobraba. Así no”. En un segundo, el mito de Tavullia ha destruido gran parte de la imagen construida durante años
Para muchísimos aficionados hoy ha caído un ídolo, empezando por el propio Marc. Rossi ha caído en su propia trampa.
- Hoy se me ha caido un mito y se llama Valentino Rossi