306 euros, el mínimo para ser español
Es el coste que tiene para los extranjeros que no tienen el español como lengua materna. Además de un test de nacionalidad (85 euros) deber superar un examen de idioma por el que hay que pagar entre 121 y 124 euros y abonar otros 100 euros en tasas. La cantidad se puede incrementar sumando lo que cueste tramitar la documentación en el país de origen y su traducción

GETTY IMAGES

Madrid
306 euros es que lo que debe pagar un extranjero de un país no hispanohablante, como mínimo, para tener la nacionalidad española. Con la nueva normativa no sólo están obligados a someterse a un test de nacionalidad que cuesta 85 euros , una prueba que se realizó ayer por primera vez , sino que deben acreditar su conocimiento de la lengua española con un título oficial. El nuevo reglamento les obliga a examinarse del nivel A2 del DELE, un examen por el que hay que pagar entre 121 y 124 euros, según una portavoz del Instituto Cervantes, que son los encargados de diseñar tanto este examen como el test de nacionalidad. Además hay que abonar otros 100 euros en concepto de tasas al Ministerio de Justicia. En total esos 306 euros, y sólo para empezar, porque hay más gastos que sumar. "Voy a pagar unos 500 euros por los papeles", asegura Abdel, marroquí de 34 años y que lleva 17 residencia en España. "Como mínimo son 300 euros pero hay que contar la traducción de los papeles, lo que cuesta pasarlos por los consulados..."
Más información

Abdel llegó a España con 17 años y no se ha marchado. "Vine para aprender el idioma y me quedé. Era más fácil para mí estudiar una carrera aquí que en Marruecos. Terminé ingeniería informática y ahora trabajo en una multinacional, cuenta. Ayer estaba en la escuela Eureka, en el centro de Madrid, para someterse al test de nacionalidad que realizaron,en su primera convocatoria 700 extranjeros en centros de toda España y en las sedes del Instituto Cervantes de distintos países.
Abdel habla un español perfecto, aunque con acento. Se queja de tener que demostrar su conocimiento del idioma después de haber estudiado en una universidad pública española y tener un título de ingeniero. En su caso el dinero no es problema, lo que lamenta perder el tiempo: "Es un examen de idioma muy básico, el A2, que es para gente que viene aquí a hacer Erasmus o a estar un mes. Qué me hagan el C2 si quieren (el de más nivel)". "Tendrían que estudiar mejor el caso de la gente que ha estudiado la carrera aquí. Y no una cualquiera sino una de 7 años como ingeniería que es mi caso”, lamenta con gesto de resignación. “Conozco médicos que llevan aquí muchos años, hablan español perfectamente, y tienen que hacer el examen".
El DELE puede hacerse en los centros de examen que las escuelas de español tienen en cada provincia, en escuelas oficiales de idiomas o en las sedes del Instituto Cervantes fuera de España. Ana Cózar, gerente de la Federación de Escuelas de Español como Lengua Extranjera (FEDELE) explica que el examen incluye una prueba oral y una escrita de redacción. Las escuelas de español envían la prueba y las correcciones al Instituto Cervantes que es el que declara apto o no apto al estudiante. Por esa prueba cobran un porcentaje que Cózar no ha querido especificar.
Antes no era necesario tener que superar un examen de idioma para pedir la nacionalidad. De hecho no costaba nada: "ni siquiera había que abonar tasas, aunque sí había que pagar por la documentación en el país de origen y por el DNI", asegura Rosa Rello abogada especialista en extranjería. A los extranjeros hispanohablantes no se les exige la prueba de idioma pero sí el test de nacionalidad y las tasas. Superar el test y el examen de español no garantiza la nacionalidad son solo nuevos requisitos que hay que cumplir. Rosa Rello añade que "no está claro además que va a ocurrir los aquellos que pidieron cita para solicitar la nacionalidad antes de que se aprobaran los nuevos requisitos pero que aún no han comenzado los trámites. No sabemos si tendrán que someterse a la nueva normativa (y pagar) o no".
Según la decisión que tome el Gobierno los extranjeros deberán abonar un mínimo de 185 euros si son de un país hispanohablante o 306 si no lo son. Es el precio, mínimo, para optar a ser español.




