IU propone doblar el IBI de casas vacías y pagar más por yates y coches de lujo
La propuesta fiscal de Alberto Garzón incluye un impuesto retroactivo de incremento patrimonial a partir de 100.000 eruos para que quienes se han enriquecido durante la crisis contribuyan a pagarla

EFE Iván Aguinaga / Ivan Aguinaga (EFE)

Madrid
Que paguen más quienes más cobran y quienes más tienen. Es la premisa sobre la que IU articula una reforma fiscal "justa, suficiente, equitativa y progresiva".
El programa electoral de Alberto Garzón incorpora, por primera vez, un impuesto único y extraordinario, a pagar en una sola vez, y que gravaría los incrementos patrimoniales superiores a 100.000 euros registrados entre el 1 de enero de 2010 y el 31 de diciembre de 2015. El tipo oscilaría entre el 5% y el 15% y se situaría en el 16% a partir de incrementos patrimoniales superiores a 5,1 millones de euros.
En el caso del IRPF, IU apuesta por mantener y consolidar la subida de 2012 y para el impuesto de sociedades se propone un tipo del 35% a partir de un millón de euros de beneficios. Además, plantea que las rentas del trabajo y del capital tributen en la misma base imponible.
La coalición propone implementar nuevos impuestos como el de bienes suntuarios, que gravaría desde yates a joyas, pasando por coches de alta gama, y también instaurar una "tasa Tobin" a la española, que penalice las transacciones financieras, además de elevar al 0,2% el gravamen sobre depósitos de entidades de crédito.
Además, y para impulsar el uso social de la vivienda, IU propone elevar hasta el 100% el recargo de la cuota del IBI en el caso de viviendas vacías con carácter permanente. También apuesta por limitar las bonificaciones fiscales de los planes de pensiones privados.
Paralelamente el programa de Garzón plantea como un objetivo central la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida, que plantea reducir en 10 puntos de PIB.
Para ello propone ampliar progresivamente hasta los ocho años el plazo de prescripción del fraude y el delito fiscal, la eliminación de las SICAV o la prohibición a los bancos rescatados de operar con paraísos fiscales.




