Adade pide que González Taboada aclare si presionó para beneficiar a la trama
La acusación popular Adade reclama la declaración como testigo del consejero de la Comunidad de Madrid después de que el exalcalde de Boadilla, Arturo González Panero, afirmase que le “presionó” para vender una parcela más barata a la trama
Madrid
Una de las acusaciones populares del caso Gürtel, la Asociación de Abogados Demócratas de Europa (ADADE), ha presentado un escrito al juez que investiga el proceso, José de la Mata, para que cite a declarar como testigo al consejero de Medio Ambiente en Madrid, Jaime González Taboada.
La petición se produce porque el imputado exalcalde de Boadilla, Arturo González Panero, conocido por la organización criminal como el Albondiguilla, sostuvo en su declaración del pasado 9 de diciembre ante el juez que González Taboada le presionó durante más de 6 meses, cuando este era el responsable de territorio en la Comunidad de Madrid, para que vendiera una parcela por 19 millones, cuando Boadilla entendía que el precio debía ser de 30.
La trama y en concreto el empresario imputado José Luis Ulibarri, se salió finalmente con la suya y logró un pelotazo de más de 11 millones con la compra del terreno, perjudicando al municipio, tal y como relata la acusación en su escrito.
ADADE reclama que el hoy consejero de Medio Ambiente de Cifuentes, aclare como testigo - no puede hacerlo de otra forma en la Audiencia Nacional por su condición de aforado - si presionó al Albondiguilla para facilitar la operación.
La cúpula del PP colocó a sus peones Gürtel, según el Albondiguilla
La declaración a petición propia del exalcalde de Boadilla, municipio considerado como el epicentro de la Gürtel, tuvo relevancia para las fuentes que investigan el caso.
No en vano, en su comparecencia implicó a la cúpula del Partido Popular, tanto a la dirección nacional como a la regional en Madrid, en supuestas presiones al menos desde los años 2003 y 2004 para que colocara a personajes relevantes de la organización criminal en puestos clave de la administración municipal desde donde la trama planificó y ejecutó gran parte de sus desmanes.
En concreto, Arturo González Panero insinuó que el expresidente José María Aznar, a través de su secretario Antonio Cámara, pidió que empleara al diputado autonómico Alfonso Bosch, que después fue decisivo para la perpetración de los delitos investigados desde la Empresa Municipal del Suelo y la Vivienda de Boadilla.
También afirmó que el entonces presidente regional del PP en Madrid y hoy presidente del Senado, Pío García Escudero, así como el exsecretario regional, Ricardo Romero de Tejada, y el entonces gerente, Luis Bárcenas, insistieron para que diera cabida como concejal a Francisco Sánchez Arranz, quien supuestamente, elaboró a la medida de la organización algunos de los polémicos pliegos de adjudicación con los que Francisco Correa obtuvo ingresos millonarios fraudulentos.
Arturo González Panero aseveró además ante el juez que Luis Bárcenas se interesó para la concesión de una obra en Boadilla a la empresa Constructora Hispánica, una de las sociedades que abonaban comisiones a la trama a cambio de adjudicaciones, y que también aparece como donante de fondos a la Caja B del Partido Popular.