El mensaje de Felipe VI solamente satisface a PP, PSOE y Ciudadanos
El mensaje de Navidad de Felipe VI ha dejado reacciones enfrentadas entre los distintos partidos políticos
María Dolores de Cospedal ha valorado el discurso porque "son históricos los días que atraviesa nuestro país" y porque el rey "no solo habló de presente, sino también de futuro". "La unidad, el consenso y la estabilidad son pilares básicos de nuestra democracia, y el rey lo destacó muy bien al afirmar que nuestro camino es el del entendimiento y la concordia", ha señalado la secretaria general del PP.
También se ha mostrado satisfecho Antonio Hernando, portavoz del PSOE. Hernando ha calificado el mensaje de Felipe VI de “adecuado y oportuno”. Para el socialista el rey ha sabido poner en valor que España es un gran país y ha sabido subrayar lo que nos une a todos. Los socialistas comparten la visión de Felipe VI sobre la importancia del respeto a la ley y al orden constitucional y sobre la idea de que nadie debe saltárselo.
El vicesecretario general de Ciudadanos (C's), José Manuel Villegas, ha asegurado que su partido "comparte con el rey Felipe VI la necesidad de diálogo y de consenso entre los partidos y coincide en lo esencial de su discurso de Navidad", pero ha lamentado que el rey no hiciera referencia a la lucha contra la corrupción y a la regeneración de las instituciones".
Aunque el mensaje navideño del rey ha gustado menos a catalanes y vascos. El líder de CIU, Artur Mas, ha lamentado que Felipe VI no haya tenido más sensibilidad “hacia los derechos de los catalanes”. En declaraciones a la prensa, Mas ha señalado respecto al mensaje navideño de Felipe VI: "Estoy de acuerdo con la apelación al diálogo, al pacto y a la concordia, pero no estoy de acuerdo con la visión de que la voluntad de unos pocos (Cataluña) pretenda imponerse a la decisión de muchos (España)".
Más contundente ha sido Gabriel Rufián, de ERC. Rufián ha dicho que es "indecente" que el rey dé "lecciones de democracia". "Ayer se produjo una imagen indecente del rey dando lecciones de democracia en el salón de un palacio más grande que la mayoría de las casas de las personas que dice representar", ha declarado Rufián a la prensa tras la ofrenda floral.
Mientras que PNV y EH Bildu han criticado con dureza el mensaje del rey. Los nacionalistas vascos acusan a Felipe VI por fomentar posturas cerradas en inmovilistas. El diputado electo del PNV en el Congreso Aitor Esteban ha calificado de "decepcionante" el mensaje navideño. Mientras que la diputada electa de EH Bildu Marian Beitialarrangoitia ha sido todavía más crítica. “Un año más, Felipe de Borbón ha vuelto a cumplir con el rito del mensaje navideño y, de esta manera, nos ha vuelto a recordar que no ha sido elegido democráticamente por la ciudadanía”.
Iñigo Errejón de Podemos ha sido más moderado en sus críticas. El diputado de Podemos cree que el mensaje navideño del rey del año pasado fue mucho más reformista que el de este año. “El otro fue un discurso reformista que reflejaba los nuevos aires de cambio que se abrían paso en la sociedad española”, ha apuntado Iñigo Errejón, que ha apuntado que ahora que el cambio ha llegado al Parlamento y que se ha reflejado en las urnas “nos hemos encontrado con un discurso con menos sensibilidad social que hace apenas una mención a las desigualdades”, ha señalado Errejón, que también ha lamentado la falta de menciones a la corrupción. “Es un discurso que habla mucho de España pero muy poco de los españoles y de sus condiciones de vida”.
El candidato de IU, Alberto Garzón, ha asegurado que "el ciudadano Felipe de Bombón es un rey que no pisa el suelo que pisa la mayoría social". Para el líder de IU, Felipe VI no habló "de los problemas cotidianos y ha comprado el discurso del PP de la recuperación económica". "No es consciente de los problemas sociales de la mayoría social", ni de la necesidad de aplicar políticas para resolver las desigualdades, ha añadido.
Garzón ha reprochado al monarca que hiciera "llamadas a la humildad y la austeridad de los ciudadanos" y optara por "un escenario pomposo y rancio" para pronunciar este mensaje navideño, "desconectado con la problemática social".