Un sector de IU mueve ficha de cara a la asamblea

Madrid

Un grito de indignación razonada. Así resumen sus intenciones los promotores de la ya bautizada como Declaración de Zamora, a cuyo borrador ha tenido acceso la Cadena SER. Bajo el título “En defensa del proyecto de IU, por la recuperación de su papel y su adecuación a las nuevas condiciones políticas”, el documento reclama la validez de IU como proyecto político y las siglas como patrimonio de lucha y alerta sobre el “deslumbramiento de no pocos dirigentes ante el fenómeno de Podemos” que se ha traducido en una deconstrucción de la marca Izquierda Unida y una respuesta basada en meras medidas de marketing personal, dirigidas a destacar al candidato, Alberto Garzón, a costa de una parálisis política de los órganos de dirección.

Además, se denuncia el silencio ante conductas que se traducen en fugas o complicidades con otras organizaciones políticas, en clara referencia a Podemos. Fuentes consultadas por la SER admiten que la iniciativa se ha acelerado tras lo ocurrido en el último Consejo Político del pasado sábado cuando el entorno de Garzón frenó la petición de Cayo Lara a los tres diputados de IU en las candidaturas de confluencia, para que formaran grupo parlamentario en el Congreso. Esas mismas fuentes creen que Garzón ha preferido no molestar a Pablo Iglesias y a unos diputados a los que ven más cómodos en Podemos, pese a militar en IU, antes que intentar una vía que podría haber dado voz y visibilidad política a la coalición en el Congreso, además de haber minimizado el plan de ajuste que dejará en la calle a más del 60% de la plantilla, y que mantiene a la organización en una situación económica crítica.

El encuentro de este sábado será inaugurado por el alcalde de Zamora, Franscisco Guarido, único regidor de IU al frente de una capital de provincia. En él participarán cargos públicos, dirigentes y militantes de Madrid, Andalucía, Cataluña, Galicia, Castilla y León, Castilla la Mancha, Extremadura, Comunidad Valenciana, Murcia y Navarra, además de concejales, alcaldes y diputados, miembros de la Ejecutiva y el Consejo Político Federal y del PCE, además de sindicalistas y activistas de movimientos sociales y feministas.

El documento plantea la salvaguarda de la pluralidad interna en Izquierda Unida y definir de forma concreta el carácter federal de la organización, de manera que se garantice la unidad programática, política y de representación institucional. También considera prioritario reforzar la participación de la militancia en todas las decisiones y prácticas de trabajo, y hace un llamamiento a reforzar el componente de movilización social de IU, recuperando su impulso fundacional.

El borrador recoge una mención a las siglas de IU como patrimonio político de primera importancia, aunque lo fundamental sea el proyecto y reclama coherencia. “No podemos predicar la convergencia y la unidad hacia fuera y negarla hacia dentro. Todos los que quieran estar con nosotros deben ser bienvenidos sin más limitación que su voluntad”.

Con esta iniciativa, un sector de IU mueve ficha de cara a la Asamblea de la coalición, convocada en mayo, después de que varios dirigentes de la coalición, entre ellos Alberto Garzón o José Luis Centella, hayan manifestado su postura ante la futura deriva de la coalición estén en libros, cartas y tribunas abiertas. En ese cónclave, IU tendrá que renovar sus cargos. Alberto Garzón ya ha manifestado varias veces que no descarta dar un paso al frente para intentar liderar la coalición en sustitución de Cayo Lara.