Iván Raña corre descalzo la Copa de Europa

Está considerado por muchos el padre del triatlón en España y este domingo la ciudad de Madrid tenía preparada una suerte de fiesta para él. Lo que la gente no sabía es que él también tenía un as bajo la manga (aunque los tritrajes no las lleven).

El gallego de 36 años compartió el grupo cabecero durante casi toda la prueba, salió bien del agua de la Casa de Campo y en la bici logró aguantar el tirón con los más jóvenes y en la T2 abrió la sorpresa que tenía preparada. Dejó los bártulos de la bici, la colgó, se quitó el casco y descalzo salió a correr.

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El objetivo era ganar 10-15 segundos que es lo que se tarda en abrocharse las zapatillas de correr. Por delante tenía 10 kilómetros de carrera a pie por la calzada madrileña y por alguna zona incluso de empedrado. Todo un espectáculo rodante por el Madrid de los Austrias y un sacrificio que demuestra el amor de este atleta por su deporte.

SIn embargo la carrera se le hizo un pelín larga y perdió contacto con Blummenfelt, Serrat y Abuin, que a la postre ocuparían el podio. Acabó sexto Raña y terminó dándose un baño de masas delante del Palacio Real. Un momento sin duda entrañable para uno de los culpables de la fiebre por el triatlón que vive España ahora mismo.