Platini se esquiva a sí mismo
El dimitido presidente de la UEFA se defenderá en la justicia ordinaria por su inhabilitación, algo que prohibió a los clubes durante su mandato
Barcelona
El mandato de Platini se caracterizó entre otras cosas por la amenaza de represalias y de castigo para los clubes que se salieran de la justicia deportiva para resolver sus conflictos con la UEFA.
Y ahora él no tiene pudor alguno en tratar de salvar el pellejo en la justicia ordinaria una vez el Tribunal de Arbitarje Deportivo, el TAS, una suerte de supremo del deporte haya mantenido la sanción, la inhabilitación a Platini por corrupción, ya que recibió 1,8 millones de la FIFA coincidiendo curiosamente con el proceso de reelección de Blatter a la misma presidencia de la FIFA.
Platini y Blatter desaparecen de la escena deportiva, emerge con fuerza en UEFA la savia nueva, la regeneración que encarna Ángel María Villar, que por cierto se negó a colaborar en la instrucción en la investigación del escándalo de la FIFA y que ahora apuesta por presidir la UEFA.