El colmo de la mala suerte
El Toyota lideró gran parte de las 24 horas de Le Mans pero a falta de tres minutos el coche se paró
La mala suerte se cebó con el Toyota, líder de la prueba de las 24 horas de Le Mans durante gran parte de la maratoniana carrera. El monoplaza de la marca japonesa se dirigía hacia la victoria en una de las pruebas más prestigiosas del mundo del automovilismo.
La teoría decía eso, que Toyota ganaría... pero no. El monoplaza dijo basta a falta de dos vueltas para el final, a falta de cuatro minutos para que el contador llegara a cero tras 24 largas horas.
El desastre de Toyota lo aprovechó Porsche, que adelantó sin problemas al hasta entonces líder para alzarse campeón de las 24 horas de Le Mans.




