Si este verano viajas al extranjero...

Madrid

Estás en una paradisíaca playa, disfrutando por fin de unas vacaciones. Decides darte un baño en el agua transparente con tus amigos. Una ola os arrastra de repente por las rocas. Quedas inconsciente. El traslado a España puede costar entre 2.000 y 100.000 euros.  El precio aumenta en función del país, si es un avión medicalizado o si es necesario que un médico te atienda durante el viaje.

Cuando se planean las vacaciones no se suele pensar en las posibles emergencias que pueden surgir. Según los datos que maneja la compañía aseguradora InterMundial, el 4% de los españoles que viaja al extranjero necesita asistencia sanitaria, de esos, un 5% precisa una repatriación.

Un seguro médico puede solucionar muchos de esos problemas imprevistos. El ministerio de Asuntos Exteriores y la Organización Mundial del Turismo recomienda la contratación de seguros médicos a la hora de viajar al extranjero. Ellos no se hacen responsables de lo que te pase, si no tienes un seguro, las posibles emergencias médicas correrán a tu cargo. Pablo Gutiérrez-Segú, responsable de emergencias consulares, afirma que no pueden pagar tratamientos médicos, "podemos intentar ayudarles a buscar alguna solución poniéndoles, por ejemplo, en contacto con sus famiiliares".  Los costes sanitarios pueden ser muy elevados. Ya en Europa lo son pero, si viajas a EEUU, aumentan los precios. Una operación habitual, como una apendicitis, puede situarse en los 12.000 euros. En Tailandia o México, destinos habituales en verano, los gastos sanitarios son también muy altos. En Europa puede utilizarse la Tarjeta Sanitaria Europea, más vale llevarla siempre contigo. Sin embargo, esta no cubre la asistencia en centros privados, los más utilizados por turistas. Tampoco cubre el traslado en ambulancia al centro, y, mucho menos, los gastos de repatriación. Aún así, "el seguro es sobre todo necesario cuando se sale de la Unión Europea".

Es importante además tener en cuenta el tipo de viaje que vas a hacer antes de contratar el seguro. Hay pólizas variadas que cubren más o menos situaciones. Si durante el viaje vas a realizar actividades de riesgo, el seguro también puede cubrirlas y, así, estar prevenido ante cualquier sorpresa.

No son solo sanitarios los problemas que pueden surgir durante un viaje. Las diferencias entre las distintas culturas pueden provocar ciertas confusiones que den lugar a multas, problemas de responsabilidad civil o incluso detenciones. "Cuando se viaja, hay que hacerlo informado sobre las costumbres, la cultura local o los símbolos nacionales". Hace unos días deportaron en Birmania a un turista español por llevar una imagen de Buda tatuada en la pierna. Lo que es legal en España no tiene por qué serlo en el país de destino. Los problemas más habituales suelen tener relación con las drogas. Hay que tener en cuenta que el simple consumo de una droga ligera, como la marihuana, puede traer consigo penas muy altas en algunos países. Como afirma Pablo "la legislación puede ser muy dura, hay que tener mucho cuidado: no viajar con drogas y no aceptar paquetes de extraños".

El ministerio de Asuntos Exteriores proporciona una ficha de cada país con la información más relevante, además de una serie de recomendaciones de viaje que informan sobre las precauciones que se han de tomar a la hora de viajar a un determinado país.  A veces pueden parecer exageradas - muchas veces recomiendan no viajar al país - por eso es bueno, también, consultar blogs o foros especializados.

Esa es la forma de prevenir esa clase de situaciones. Pero, ¿qué ocurre al ser detenido? Lo principal es tener claro que la ley que se aplica al hecho cometido es la ley del país en el que te encuentres y no la ley española. "Cuando estamos en el extranjero pasamos a estar bajo la competencia y jurisdicción de las leyes extranjeras", es decir, la acción será o no considerada delito en función de lo que dicte la ley local. En ese caso, la Embajada o Consulado nada podrá hacer por impedir la aplicación de la sanción o pena que conlleve.

En la página web de Exteriores se informa sobre las responsabilidades que tienen las Embajadas y Consulados ante cualquiera de estas situaciones. Las Embajadas "pueden ayudarte en situaciones de desprotección, poniéndote en contacto con la familia, ayudándote a entender la legislación o verificando que estás en buenas condiciones".  Podrán, en todo caso, proporcionar la información que se requiera y asistir al perjudicado. Solo en circunstancias excepcionales podrán adelantar el dinero necesario para una repatriación, "que es por lo general reembolsable y no inmediato".

Sin embargo, al contrario de lo que se suele creer, la Embajada o Consulado, en general, no puede involucrarse directamente en el caso ni personarse en nombre del detenido. Tampoco puede prestarte dinero, ni sacarte de la cárcel, ni rescatarte en situaciones de peligro. "Hay que tener en cuenta que nuestra respuesta es administrativa y presupuestaria", Pablo afirma que "no es una cuestión de voluntad, a veces no es posible porque tenemos que respetar la competencia de las autoridades locales, tenemos limitaciones y un presupuesto que cumplir".