Horas de guardia por una foto
Cientos de seguidores esperan al Real Madrid durante todo el día en la puerta de su hotel
Montreal
La rutina del Real Madrid en Canadá es muy clara. Dado que Zidane tiene programadas dos sesiones diarias de trabajo en la ciudad deportiva del Montreal Impact, los jugadores abandonan su cuartel general al filo de las nueve menos cuarto de la mañana, regresan pasadas las doce, y vuelven a salir del Ritz Carlton a las cuatro en punto para el entrenamiento vespertino.
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Este planning lo tienen muy presente los aficionados blancos que residen en esta ciudad, porque pases a la hora que pases por la puerta del hotel siempre hay gente. Algunos se tiran muchas horas junto a las vallas de acceso para lograr un sitio privilegiado y ver de cerca a sus ídolos.
La comitiva madridista está formada por un coche de seguridad que abre camino al autobús del equipo y a otro destinado para el resto de la expedición. El recorrido empieza en una calle muy transitada, lo que hace que los semáforos y el tráfico denso demoren el inicio de la marcha. Eso trae consigo que muchos jóvenes corran junto al bus durante los primeros metros, poniendo muy nerviosa a la policía. Las autoridades locales no recuerdan otro equipo que haya despertado tanta expectación.
Para Kenzi, que luce orgulloso una camiseta de Francia con el nombre de Zidane, "Canadá no es el mejor lugar para jugar al fútbol cuando eres joven porque otros deportes tienen más tradición y mejores instalaciones, pero nos encanta verlo y Zizou es mi ídolo". Su amigo Dave es madridista y dice que es fácil seguir al actual campeón de Europa en la distancia. "Los chicos canadienses somos muy futboleros. Vemos todos los partidos en directo por televisión. Es una suerte que ahora estén aquí y podamos sentirles cerca durante tantos días".
"La visita del Real Madrid es un regalo"
La pasión por el conjunto blanco alcanza cotas insospechadas. Para Bidjad Triki, que permanece toda la jornada velando armas a la espera de una fotografía, "la visita del Real Madrid es un regalo. Hace dos semanas mandé un mail a la organización para agradecer que nos trajeran al equipo. Este club y estos jugadores están en la cima del mundo, y sus éxitos me sirven de inspiración para crecer y ser mejor".
En la misma línea se pronuncia Stephann, un joven venezolano que vive en Montreal. "Mucha gente tiene sueños y esos sueños comienzan desde niños. La multiculturalidad de este país es tan grande que aparecen nuevas pasiones como ésta del fútbol. La gente admira a los jugadores del Madrid y se fija en ellos, pero no para ser una copia sino para aprender lo bueno y ver hasta dónde llegan los modelos, y saber los límites de uno mismo".