Los números que hacen presidentes; un recorrido por las investiduras
Del apoyo holgado en las mayorías absolutas y la geometría variable cuando las urnas no la otorgan, hasta llegar a la única investidura fallida de la democracia
Madrid
La investidura que este martes afronta Mariano Rajoy se prevé fracasada. Sin embargo, en la breve historia democrática de nuestro país, Rajoy no es el primer presidenciable que encuentra obstáculos en los números. Desde el inicio de la democracia, los candidatos han disfrutado de mayorías absolutas, han sufrido para alcanzar las simples y alguno se ha marchado del Congreso directamente sin ser investido.
- Legislatura Constituyente
Aún no estaba redactada la Constitución. Adolfo Suárez había sido nombrado presidente del Gobierno por el rey y como fue el candidato más votado en las primeras elecciones legislativas en 1977, continuó al frente del Ejecutivo hasta su dimisión cuatro años después.
- Las mayorías absolutas
Desde aquella legislatura constituyente, lo más habitual tras la celebración de elecciones, es que el candidato propuesto por el rey, haya superado el trámite parlamentario con holgura.
Lo hicieron Adolfo Suárez en 1979, Felipe González en cuatro ocasiones —la más abultada en 1982 con 202 votos a favor—, Jose María Aznar en 1996 y 2000, José Luis Rodríguez Zapatero en el año 2004 y Mariano Rajoy en 2011.
- Las mayorías simples
Aunque más rebuscado, algunos candidatos que después se convirtieron en presidentes del Gobierno, sufrieron la derrota en primera votación y tuvieron que aguardar a la segunda.
Fue el caso de Leopoldo Calvo Sotelo en 1981. Aunque este incidente no fue el más destacado en su investidura ya que, en mitad del debate el 23 de Febrero, se produjo el intento de golpe de Estado de Tejero, teniéndose que posponer la sesión.
Zapatero, tras ser reelegido en las generales de 2008, no contó con el respaldo de la Cámara para renovar su mandato en primera votación. Sin embargo en la segunda, la mayoría simple lo hizo permanecer en La Moncloa.
- La investidura fallida
El precedente que previsiblemente se repetirá este martes, lo sentó Pedro Sánchez el pasado mes de marzo. Los socialistas resultaron la segunda fuerza más votada en las elecciones generales y aunque contaban con el respaldo de los diptuados de Ciudadanos, el líder del PSOE se quedó a decenas de votos de ser investido presidente en ambos intentos.
A todas luces Mariano Rajoy correrá la misma suerte que Pedro Sánchez cinco meses después. A pesar de llevar al hemiciclo el flamante pacto con Ciudadanos en la valija, los 170 síes que acumula el presidente del Gobierno en funciones, son insuficientes para llegar a la mayoría absoluta necesaria que revalide su Ejecutivo en primera votación.
En la segunda, donde bastan más votos afirmativos que negativos, tampoco tiene las de ganar. PSOE y Podemos forman un bloque de 156 noes, que sumado a las tensiones con los partidos nacionalistas vascos y catalanes, ponen muy difícil su triunfo.