¿Qué debe tener una canción para ser pegadiza? La ciencia lo revela
Un estudio realizado a más de 3.000 personas revela qué es lo que necesita una canción para convertirse en una melodía pegadiza
Madrid
Un 90 por ciento de la sociedad reconoce que se le pega una canción al menos una vez por semana. Esto sucede, por norma general, cuando el cerebro no funciona al máximo rendimiento como, por ejemplo, en la ducha, haciendo la comida o paseando.
Pero, ¿pueden todas la canciones convertirse en pegadizas? Un estudio de varios investigadores de la Universidad de Durham, publicado en la revista Psychology of Aesthetics, Creativity and the Arts, determina que no.
<p>Queen es el grupo musical que más éxitos incluye en la lista de las canciones más pegadizas de la historia.</p>
Entonces, ¿qué necesita una canción para convertirse en pegadiza? Existen diversas características que comparten cada una de las composiciones que destacan por quedarse en la mente de hombres y mujeres continuamente.
Canciones rápidas y fáciles de recordar
El estudio determina que todas las canciones que han sido consideradas pegadizas durante la investigación cuentan con un ritmo rápido, melodías genéricas y fáciles de recordar y repeticiones o saltos, lo que las aleja de las canciones de pop convencionales.
Según esta investigación, la canción que cumple todos estos requisitos es 'Twinkle Little Star' (Brilla, brilla, estrellita), puesto que se eleva en su primera estrofa para caer posteriormente en la segunda.
Las más de 3.000 personas que han participado en el estudio han ayudado a los investigadores a entender cómo funcionan las redes cerebrales involucradas en la percepción, las emociones, la memoria y los pensamientos espontáneos
Lady Gaga, la reina de las canciones pegadizas
Si hay una artista capaz de hacer melodías pegadizas, esa es Lady Gaga. La encuesta realizada a más de 3.000 personas determinó que tres de las canciones de la cantante se encuentran entre las más pegadizas del mundo.
'Bad Romance', 'Poker Face' y 'Alejandro'. La artista es capaz de introducir saltos dentro de sus melodías genéricas para crear éxitos capaces de adueñarse de los pensamientos espontáneos de la sociedad.
Entre el resto de canciones que se sitúan entre las más pegadizas destacan el mítico 'Bohemian Rhapsody' de Queen, el 'Don't stop believing' de Journey o 'California Gurls', de Katy Perry.
Tras esta investigación, la principal autora del trabajo, Kelly Jakubowski, anima a los artistas a que sigan estos parámetros: "Esto podría ayudar a los aspirantes a compositores o a los anunciantes que quieran encargar una melodía que se recuerde durante días o meses".
David Justo
(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en tecnología y buscador de historias virales e inverosímiles...