Torbe abandona la cárcel de Estremera tras pagar una fianza de 100.000 euros
El director de cine porno queda en libertad después de que varios familiares hayan pagado una fianza de 100.000 euros: tiene prohibido acercarse a menos de 500 metros de una denunciante
Madrid
Ignacio Allende Fernández, director de cine porno más conocido como 'Torbe', ha abandonado este viernes la cárcel de Estremera, donde permanecía desde el pasado mes de abril acusado de extorsionar a mujeres - algunas menores de edad - para participar en sus vídeos. Según han confirmado fuentes jurídicas, el acusado ha abandonado la cárcel después de que varios familiares hayan consignado la fianza de 100.000 euros marcada por el juzgado.
En un auto del pasado 26 de octubre, el juzgado de instrucción nº 29 de Madrid accedía a la petición de su abogado y decidía dejarle en libertad bajo fianza de 100.000 euros "atendiendo a la complejidad de las diligencias, así como su necesaria prolongación en el tiempo sin poder concretarse su finalización".
La libertad de Torbe se dicta en contra del criterio de la Fiscalía y con varias medidas cautelares: el instructor le retira el pasaporte, le prohíbe salir de España, le obliga a comparecer en el juzgado todos los lunes y también le prohíbe acercarse a menos de 500 metros de una de las denunciantes, o comunicarse con ella por cualquier medio, por su calidad de testigo protegido.
Trama de supuesta extorsión a mujeres
Con la puesta en libertad de Ignacio Allende Fernández ya no quedan acusados en prisión por este 'caso Torbe' después de que hace unas semanas el juez también dejase en libertad a su socio ucraniano y a la mujer supuestamente encargada de captar a chicas para sus vídeos.
Todos fueron detenidos el pasado mes de abril, acusados de obligar a mujeres a participar en los vídeos pornográficos del director, en ocasiones extorsionadas y algunas de ellas menores de edad. Una testigo protegido del caso afirmó ante la policía y ante el juez instructor que había sido obligada a mantener encuentros sexuales con diversos futbolistas.
Por ahora, la instrucción ha dejado, por ejemplo, conversaciones grabadas entre trabajadores del director afirmando que las mujeres se echaban a llorar en medio de las grabaciones, o también del propio Torbe llamando "putas" a sus actrices. El director cuenta con antecedentes penales por haber grabado un vídeo pornográfico con una menor de edad en 2005, y además será llevado a juicio el próximo mes de abril por tres actores de la que iba a ser su única película comercial hasta la fecha.