El “pluriempleo” de Cospedal se convierte en doctrina para el PP
Desde Génova dicen que no pueden reclamar a sus dirigentes que cumplan con la consigna de "una persona, un cargo" con una secretaria general que compagina varios puestos
Madrid
Algunos nombres del Gobierno mantienen responsabilidades en el PP pero no tienen pensado renunciar a ellas. Hay, incluso, quien se revuelve si se lo plantean. En Génova dicen que ellos no pueden exigir nada porque su secretaria general compagina el puesto con el ministerio de Defensa y, dan por hecho, que en el futuro también seguirá al frente del PP de Castilla-La Mancha.
Por eso, explican, que siguiendo "la doctrina Cospedal" (así es como se ha bautizado) es imposible aplicar la consigna de "una persona, un cargo" que tanto defendió en su día el líder de los populares en Andalucía, Juan Manuel Moreno. Y precisamente él va a ser uno de los primeros en vivirlo en sus filas. Primero con José Antonio Nieto, número dos de Interior, además de presidente de la formación en Córdoba. Y también con José Enrique Fernández de Moya, nuevo Secretario de Estado de Hacienda sin dejar de ser responsable del PP de Jaén.
Pero no son los únicos casos. También está el de Pablo Zalba, al que han nombrado presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO) mientras sigue capitaneando la gestora del PP de Navarra. Y el del ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal quien no ha dejado a un lado los temas económicos del partido a nivel nacional.
Varios dirigentes apuntan, además, que esta situación se puede complicar con los próximos congresos regionales. Ponen, como ejemplo, al nuevo Secretario de Administraciones Territoriales, Roberto Bermúdez de Castro. Hay quien cree que sería un buen sucesor de Luisa Fernanda Rudi en Aragón pero, para otros, sería incompatible con el desarrollo de su labor junto a Soraya Sáenz de Santamaría.
"Bueno, ya nada es imposible. Si unos pueden hacerlo ¿por qué no el resto?", señala un diputado. Para algunos populares puede ser un problema que esto se extienda por su formación. Pero, la verdad, es que el brillo y proyección nacional luego pueden traer beneficios a nivel territorial y, por eso, la clave ahora es "aguantar".
También hay a quien le parece injusto que se hable tanto de Cospedal mientras nadie critica que, en unos meses, Cristina Cifuentes salga reafirmada como presidenta del PP de Madrid al tiempo que sigue controlando el Gobierno regional. Algunos dicen que parece que ya se ha olvidado que hubo un día en el que la tradición era que la jefatura del partido no recayera en manos de la persona que estaba al frente de la Comunidad o del Ayuntamiento para que se implicara de lleno y, por eso, se eligió a Pío García Escudero. Pero los detractores de Cospedal señalan que "no es lo mismo" porque a ella nunca se le ha reprochado que fuera presidenta de Castilla La Mancha y de la formación regional. Siempre se le ha echado en cara que, a todo ello, sumara, además, su función como número dos del partido.