El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha defendido que el nuevo acuerdo de paz «es mejor» que el original porque ha incorporado las propuestas de «la inmensa mayoría de los colombianos», por lo que ha confiado en que logre un gran consenso en el Congreso y sea refrendado esta misma semana. «Reconozco que este acuerdo es mejor que el que firmamos en Cartagena», ha dicho en el discurso que ha pronunciado este jueves en el Teatro Colón de Bogotá, tras estampar su firma en el nuevo texto junto a la del jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverri, alias «Timochenko». «Es mejor porque recoge las esperanzas y las observaciones de la inmensa mayoría de los colombianos. Del 50 por ciento de los que votaron sí y de un importante porcentaje de los que votaron no» en el plebiscito del pasado 2 de octubre, ha esgrimido. Santos ha subrayado que con este documento corregido «se logra poner fin al conflicto armado con las FARC y sentar las bases para la construcción de una paz estable y duradera, más amplia y más profunda». «Logramos parar el desangre y que no haya más víctimas», ha valorado. En concreto, ha apuntado que con este segundo borrador «el campo se convertirá en motor de crecimiento», la justicia transicional «permitirá voltear la página de la violencia», se da «un paso adelante para superar el problema de las drogas» y las FARC se convertirán en un partido político. Santos ha recalcado que esta vez el acuerdo de paz es «definitivo», por lo que ha urgido a todos los sectores políticos y sociales a «unirse y asumir la inmensa responsabilidad de aprovechar esta gran oportunidad» de acabar con la guerra. «Quiero invitarlos a que dejemos atrás definitivamente décadas de violencia para unirnos, por nosotros, por Colombia, por esta patria querida, y trabajar juntos por la reconciliación alrededor de ideales compartidos de paz, convivencia y respeto», ha rogado. El último premio Nobel de la Paz ha pedido a los colombianos «que vean en este momento un momento de cambio, de transformación, que permita creer en un mejor mañana, no con la exigencia de lo inalcanzable, sino con la certeza de lo posible». Este consenso, ha abogado el líder conservador, debe reflejarse en el Congreso, donde se llevará a cabo el proceso de refrendación e implementación del acuerdo de paz «bajo el control de la Corte Constitucional».Santos ha defendido la elección de la vía parlamentaria para este procedimiento. Por un lado, ha recordado que el Congreso «es la esencia de nuestra democracia» y, por otro, ha enfatizado «la urgencia de la paz» porque la tregua vigente «había comenzado a desmoronarse». «Espero que la refrendación sea aprobada en el curso de la próxima semana. Ese será el día D», es decir, cuando comience la implementación de lo pactado en este último mes en La Habana y Bogotá, ha adelantado Santos. «Eso significa que cinco días después se iniciará el movimiento de las FARC hacia las zonas veredales transitorias, a los 90 días de iniciará la dejación de armas y en 150 días todas las armas de las FARC estarán en manos de Naciones Unidas», ha explicado. Santos ha afirmado que la implementación «es una labor fundamental, tan importante como el acuerdo mismo» porque «se abre allí una puerta para buscar consensos y espacios de entendimientos» donde «el aporte de todos será muy valioso». «Convocaré a todos los partidos, a todos los sectores de la sociedad, a que participen, contribuyan y logremos así un gran acuerdo nacional para la implementación de la paz (...) Demostremos que podemos poner el país por encima de los intereses políticos», ha instado.