Política
Congresos políticos

Las corrientes críticas de PSOE, Podemos y C's se preparan para mostrar su fuerza

Todos los partidos, excepto el PP, miden en sus congresos la fuerza de las corrientes críticas

Íñigo Errejón y Pablo Iglesias, en una fotografía de archivo. / EFE

Podemos: el Errejonismo trata de evitar un Vistalegre a la Medida de Iglesias

Madrid

A una semana del decisivo Consejo Ciudadano (máximo órgano de dirección del partido) que aprobará el calendario para el segundo congreso de Podemos, una parte del partido se rebela ante el modelo de congreso que ha defendido Pablo Iglesias: votar los proyectos de manera conjunta con las listas. Íñigo Errejón y sus afines han dado un paso al frente para reclamar que la llamada Asamblea Ciudadana de Vistalegre II de los días 10, 11 y 12 de febrero se celebre con unas reglas de juego distintas y más "democráticas" que las planteadas por Pablo Iglesias, que favorecen sin ambages sus intereses y que, según denuncian, están pensadas para el "sometimiento" del errejonismo. Más de 330 cargos de la formación morada han firmado un manifiesto que cuenta con el respaldo de cerca de 3.000 simpatizantes y en el que se apuesta una forma de votar diferente para que ese congreso sea no se convierta en "un combate de boxeo".

Iglesias defiende un sistema de votación único de programas y listas que debilita a su número dos. Así, Errejón quiere separar el debate sobre el proyecto (un debate en el que tiene mejores perspectivas de hacer valer su posición, su Podemos transversal) de la votación relativa a las "caras" (en la que el secretario general y sus afines parten siempre con ventaja).

A priori, el Consejo Ciudadano Estatal iba a decidir en su próxima reunión el formato de la votación. Sin embargo, el propio Iglesias anunciaba el pasado lunes que serán los inscritos en Podemos quienes decidan. Si las bases aprueban en la consulta que en la Asamblea se vote de forma conjunta, los errejonistas tendrán que tomar la decisión de presentar o no una candidatura alternativa.

En el PSOE se espera más de un candidato al congreso

Si hay una cosa clara en el PSOE es que el Congreso del partido que se celebrará el año que viene no va a ser un congreso de unidad. De momento, nadie ha anunciado su candidatura a la secretaría general, aunque todo el mundo da por hecho (y sus movimientos indican que así será) que la presidenta andaluza, Susana Díaz, finalmente dará el paso. Esta por ver si lo dará también el ex líder del PSOE, Pedro Sánchez. Pero el pensamiento general es que, sea él o no, habrá más de un candidato.

Aún no hay fecha prevista para el congreso y ahí está una de las batallas más duras que se están viviendo ahora mismo. Desde la gestora que dirige el partido, con Javier Fernández a la cabeza, trabajan para que la cita se celebre en junio o, como muy pronto, a finales de mayo. Su argumento es que debe haber tiempo para que se produzca un buen debate. Desde los sectores críticos quieren, por el contrario, que ese congreso tenga lugar cuanto antes. Se está oganizando una coordinadora nacional con militantes de varias federaciones socialistas que presionan para adelantar el cónclave, aunque en ella no participan de momento dirigentes de primer nivel.

Por ahora, van ganando los postulados de la gestora que ha dejado para después de reyes el Comité Federal que dibujará la hoja de ruta para el Congreso.

Albert Rivera mide la intensidad de su contestación interna

El de Ciudadanos será un Congreso tranquilo. Nadie en el partido, ni los dirigentes más críticos cuestionan el liderazgo de Albert Rivera, que aún no tiene un rival que le dispute la presidencia. Sí existen bastantes afiliados, y algunos cargos orgánicos, que están dispuestos a dar la batalla de las ideas. Lo que plantean sectores del partido es modificar los estatutos y redefinir la estrategia política.

Lo hace por ejemplo la eurodiputada Carolina Punset, que abandonó la Ejecutiva del partido hace unos meses por no compartir el rumbo que ha adoptado la formación en los últimos meses. La expansión nacional del partido y la gestión del resultado de las elecciones del 20 de diciembre y del 26 de junio han supuesto un desgaste importante a nivel interno.

Punset no ha decidido aún si presentará candidatura alternativa a Rivera. Sí ha criticado públicamente que el partido en los últimos meses haya dado demasiada importancia al marketing político. Cree que la dirección actual ha sustituido a los referentes e intelectuales que fundaron Ciudadanos por directores de comunicación “que solo se preocupan de no perder votos”. “Aunque ello suponga mostrar un tono menos duro con el nacionalismo”, según advierten algunos de los intelectuales fundadores como Albert Boadella o Arcadi Espada

El modelo de partido también está en entredicho. La dirección rechaza que haya liderazgos regionales con poder orgánico y por eso hay grupos de afiliados que piden que la elección de las cúpulas autonómicas sea más transparente y abierta.

 
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