Iglesias fracasa en su primera reunión "para buscar la unidad"
Íñigo Errejón se muestra dispuesto a llevar su propia lista a Vistalegre II
Siguen las posturas enfrentadas entre Iglesias y Errejón en plena cuenta atrás para Vistalegre / VÍDEO: ATLAS
Madrid
El encuentro había generado grandes expectativas. No porque la tensión entre ‘pablistas’ y ‘errejonistas’ hubiese amainado en las últimas horas sino porque desde el aparato del partido el encuentro se había planteado como un verdadero "momentum", el pistoletazo de salida para un intento honesto de llegar a un acuerdo.
De hecho, con o sin intenciones ulteriores, el departamento de prensa de la formación morada convocó a los periodistas a la cita mediante un mensaje que decía "a las 13:30 Pablo Iglesias se reúne con Íñigo Errejón, Miguel Urbán, Carolina Bescansa y representantes de otras propuestas para debatir los documentos y buscar la unidad".
Sin embargo, los resultados del encuentro pronto desinflaron el entusiasmo de la convocatoria ofical y el sector ‘errejonista’ no ocultó cierto escepticismo sobre las verdaderas intenciones del líder de Podemos en su "búsqueda de la unidad".
Los líderes de las distintas corrientes reconocían a la salida de la reunión que no se habían logrado avances de ningún tipo y daban a entender que el encuentro había servido principalmente para poner negro sobre blanco las diferencias existentes.
Errejón, dispuesto a confrontar en Vistalegre
El número dos de Podemos no descartaba seguir negociando pero dio por sentado que el pacto total es prácticamente imposible y que, de alcanzarse pactos, estos serían parciales y circunscritos a aspectos concretos. "En algunas cosas nos pondremos de acuerdo y en otras, decidirá la gente. No vamos a hurtarle a la gente el debate”, dijo a la salida dando a entender que, si nada cambia, presentará su propia lista a Vistalegre II.
Iglesias también asumió esa posibilidad: “Voy a trabajar para que estemos todos unidos, si hay compañeros que quieren ir por separado, tampoco es ningún problema”. Ahora bien, el secretario general demostró que no piensa ponérselo fácil a su número dos. "En el caso de que fuéramos separados y la lista de la corriente de Íñigo y Tania fuera la que tuviera más apoyos, creo que el líder debería ser Íñigo y no yo", dijo.
En este clima, el líder y su número dos se hacían mutuamente responsables de la fractura. Errejón aseguraba de que la unidad no se consigue “a golpe de corneta”, a lo que Iglesias respondía que “la unidad se consigue debatiendo, ni con documentos ni haciendo declaraciones agresivas en los medios”. El plazo para conseguir el cada vez más difícil acuerdo finaliza el 1 de febrero.
Mariela Rubio
Redactora de la sección de Política. Cubre la información del Partido Popular. Anteriormente fue redactora...