Los exdirectores de supervisión del Banco de España se suman a las críticas de los correos de Casaus
Los exdirectores generales de supervisión del Banco de España defienden la operación de salida a bolsa de Bankia como la mejor opción para la entidad en el año 2011.
En su declaración como investigados, ambos justifican la viabilidad de las cuentas y aseguran que el rescate solicitado de 7.000 millones de euros por parte de Rato se ajustaba a las necesidades del momento. Bankia necesitó 24.000 millones para ser rescatada
Los exdirectores generales de supervisión del Banco de España en el año de la salida a bolsa de Bankia, Jerónica Martínez Tello y Mariano Herrero han defendido ante el juez Fernando Andreu la actuación supervisora del Banco de España y la reformulación de las cuentas. Según fuentes jurídicas presentes en los interrogatorios, Martínez Tello han cuestionado el importe del rescate pedido por el equipo actual gestor de Bankia. En su opinión las necesidades económicas se ajustaban al importe solicitado por Rodrigo Rato, entro los 7.000 y los 9.000 millones de euros frente a los casi 18.000 solicitados por el equipo de José Ignacio Goirigolzarri.
Ante el juez Andreu, y en calidad de investigados, han asegurado que no recibieron los polémicos correos críticos con la operación de salida a bolsa aunque sí discutieron el contenido que han tachado de opiniones personas con alternativas irrealizables.
Mañana el juez Fernando Andreu ha citado al autor de los correos que advertían del fiasco de la salida a bolsa, el inspector José Antonio Casaus que declarará en calidad de testigo justo después del exgobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez que, en su caso, acude como investigado por orden de la sala de la Audiencia.
La acusación popular reprsentada por la Confederación Intersindical de Crédito (CIC) bajo la dirección jurídica de Andrés Herzog, que ha llevado el peso de los interrogatorios, confía en poder constatar con el inspector Casaus que había un agujero financiero a pesar de los ajustes en la contabilidad de Bankia y que cuando se sacó a bosa la operación terminaría en una nacinalización con un quebranto millonario para el contribuyente.