Fernández Ordóñez sobre los correos: "Hicieron bien en no enviármelos, eran erróneos"
El exgobernador del Banco de España ha defendido en su declaración como investigado su gestión en la salida a bolsa de Bankia en 2011 y ha arremetido contra los correos del jefe de supervisión que alertaban de la quiebra de la entidad
Madrid
El exgobernador Miguel Ángel Fernández Ordoñez no solo ha defendido la viabilidad del grupo BFA Bankia para salir a bolsa en el verano de 2011 sino que se ha mostrado tajante y orgulloso de su actuación para dar luz verde a la operación bursátil. Según fuentes judiciales presentes en el interrogatorio, el que fuera gobernador del Banco de España de 2006 a 2012 ha achacado la quiebra posterior de la entidad pública a los efectos de la burbuja inmobiliaria y la segunda fase de crisis financiera sobrevenida.
El exgobernador, hijo de ingenieros, ha llegado a recordar ese detalle en la sala para comparar los años en los que se decidió la fusión de las cajas y su salida al parqué con un terremoto o una catástrofe natural que se lleva por delante cualquier puente por bien construido que esté.
Fernández Ordóñez ya había declarado hace cuatro años como testigo y hoy lo ha hecho como investigado ante el juez de instrucción Fernando Andreu por orden de la Sala Tercera de la Audiencia que veía indicios más que suficientes para investigar su gestión al frente del organismo.
Sobre su administración en el Banco de España, ha asegurado que no hizo ninguna gestión para favorecer a las cajas, en particular a Bankia, ya que “el supervisor nunca puede hacer gestiones en beneficio de su supervisado” y entiende que ninguna otra persona lo hizo, una referencia que fuentes de la sala han interpretado como una mención vedada a miembros del Gobierno u otras instancias políticas.
Javier Ariztegui, el exsubgobernador y su mano derecha, ha mantenido ante el juez una versión similar sobre la viabilidad financiera de Bankia a pesar de las alarmas y referencias en los informes de seguimiento.
Fernández Ordoñez, que declaraba en esta ocasión como investigado, ha arremetido contra el inspector jefe de supervisión del Banco de España autor de al menos cuatro correos críticos con la operación y en los que aseguraba que el grupo era “una máquina de perder dinero” y avisaba del quebranto millonario que iba a suponer para accionistas y contribuyentes, un agujero que inspector calculó en 15.000 millones de euros, cifra que una vez Bankia tuvo que ser rescatada ascendió a 24.000 millones de euros. Según Fernández Ordóñez, “no tuvo acceso a esos correos” e hicieron bien en no reenviárselos ya que "no tenía por qué conocerlos" porque “eran erróneos”.
Fernández Ordóñez ha asegurado que se sintió informado en todo momento y ha ido más allá y ha llegado a decir que Casaus se equivocó en sus predicciones. En un momento de rifirafe con el abogado de la acusación popular, Andrés Herzog, éste le ha respondido que Casaus al menos podrá decir que ha acertado por casualidad, de hecho, se quedó corto al calcular la cifra del rescate en 15.000 millones, término que también ha negado el exgoberador.
El expresidente del Banco de España ha introducido una novedad en su declaración al asegurar que la regulación era escasa y la entidad no estaba preparada para una crisis financiera de ese tamaño. Además, ha dicho ser heredero de un problema anterior y una situación que venía de atrás.
Casaus: "El banco malo era Bankia"
El jefe de supervisión, José Antonio Casaus, ha declarado a continuación de MAFO, en su caso como testigo. Según las mismas fuentes, ha ratificado plenamente los correos de principio a fin y mantiene que discutió el contenido con su equipo. Casaus ha defendido que estaban "meditados y pensados" porque era consciente de la importancia del asunto.
Casaus también ha defendido la oficialidad del contenido vía 'mail'. Asegura que los informes de seguimiento no van firmados y no por eso dejan de ser oficiales. En el seno de los departamentos de inspección, ha detallado, lo importante no es el medio sino el contenido.
En tono anecdótico ha recordado que dentro del Banco de España alguien le pidió que dejara de hablar del banco malo al referirse a la entidad pública, a lo que él respondió, "tienes toda la razón, Bankia es el banco malo, BFA es muy malo".
Sin preguntas del juez
En el arranque de la declaración, el juez Fernando Andreu ha recordado al inspector Casaus que le citaba para contrastar el contenido de los correos con las declaraciones de los ex directivos de los organismos reguladores aunqeu después no ha formulado preguntas. Los correos han sido el motivo fundamental para que la Sala de lo Penal de la Audiencia ordenara al juez Andreu abrir la investigación. El magistrado no ha hecho ninguna pregunta a la excúpula del organismo y el regulador durante la ronda de testificales, tampoco lo ha hecho el ministerio público, ni el FROB, personado como acusación.