La verdad detrás del bulo sobre la agresión de un musulmán en un centro de salud

Madrid

La supuesta historia sobre un musulmán agrediendo a un médico en un centro médico español ha llegado a alcanzar un total de tres millones de visitas en la red social Facebook pero, a pesar de que muchos se creyeron esta historia y la dieron por verdadera, no lo es tanto. La agresión ocurrió en una localidad rusa llamada Nóvgorod y el protagonista de la agresión era un ciudadano ruso en estado de embriaguez.

La agresión fue totalmente verdadera. El hombre golpea y zarandea a la médica en primer lugar y, posteriormente, cuando una enfermera aparece para separarlos también es agredida a puñetazos por el hombre. Hechos reales pero no así el entorno que rodea al vídeo publicado por Juan Manuel González Sosa en su Facebook el pasado 25 de marzo que acompañó con un texto totalmente irreal y fuera de contexto: “Musulmán dando las gracias por su acogida en Europa en un centro de salud español. Imágenes que TVE no difunde para no caer en la alarma social. ¡Manda huevos, nos van a comer con patatas!"

Contrastar los hechos antes de darlos por válidos

El difusor de este vídeo no explica de dónde obtiene la información de su texto en ningún momento pero muchas personas se creyeron la historia que se convirtió en viral en muy poco tiempo. El hombre del vídeo grita en un idioma extranjero, pero era ruso, no árabe. La cuenta de Twitter @malditobulo, desde la que se denuncian las noticias ofrecidas como reales pero que finalmente son falsas, denunció el mismo día de la publicación del vídeo pero no pudo evitar la gran difusión en las redes.

Rustem Adagamov, uno de los blogueros más famosos de Rusia, fue el que publicó en primer término este vídeo hace un mes en su cuenta de Twitter explicando que un hombre en estado de embriaguez golpeaba a "un guardia, un enfermero y una enfermera" causando a fuertes daños cerebrales a una de estas personas. Este bloguero si utiliza fuente oficial, a diferencia de González Sosa, una publicación dedicada a cubrir temas relacionados con la salud en el país llamada MedRussia.

Un claro ejemplo donde se demuestra que es imprescindible contextualizar, contrastar y verificar las noticias antes de validarlas, ya que los sentimientos de muchas personas pueden estar en juego.