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Crean la moneda más segura el mundo para evitar falsificaciones

La moneda se ha creado con el metal más seguro fabricado hasta la fecha

Madrid

La nueva moneda de la libra esterlina a prueba de falsificaciones creada por David Pierce circula en el mercado desde el 28 de marzo. Aunque parezca una moneda similar a las que conocemos hasta ahora realmente su diseño es bastante innovador y el objetivo principal es terminar con los fraudes y las falsificaciones de monedas a través del diseño que esconde incógnitas que convierten a la moneda en una pieza prácticamente imposible de plagiar.

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En el año 2014 comenzaron los primeros esbozos de este proyecto, año en el que sus creadores prometieron lanzar masivamente la moneda tres años después y, como vemos, han cumplido su palabra. Más de dos millones de euros invertidos han hecho falta para desarrollar esta nueva creación que lleva integrada el 'Integrated Secure Identifiacation System' o iSIS, sistema que funcionaría como una "capa de seguridad" impenetrable.

Un sistema que escanea y verifica monedas en cuestión de segundos

La información sobre el funcionamiento de este sistema no circula por la red ya que la Casa de la Moneda Royal Mint no ha querido aportar detalles al respecto con la finalidad de que los falsificadores no accedan a ella. Lo que sí se sabe es que iSIS escanea y verifica las monedas en cuestión de segundos para identificar aquellas que son falsas. Según Royal Mint el 3% de las monedas actuales en circulación desde 1983 son falsas.

La nueva moneda de la libra esterlina tiene doces lados y combina dos metales, uno dorado y otro plateado. La Reina de Inglaterra es protagonista de una de las caras y en la otra vemos un puerro, un cardo y un trébol que representan las diferentes partes del Reino Unido. Además, en una de las caras podemos observar cómo el símbolo de la libra se transforma en el número 1 dependiendo del ángulo que se mire, como si fuera un holograma.

El director ejecutivo de la Casa de la Moneda Británica ha señalado que el diseño tiene la finalidad de "adaptarse al futuro" y que utiliza estos elementos de seguridad "para salvaguardar la confianza pública en la divisa británica" y "reducir costes para bancos y otros negocios".

Los ciudadanos y los comercios tendrán hasta el 15 de octubre para ir reemplazando las monedas antiguas y adaptarse a los nuevos modelos, hasta esa fecha la vieja libra seguirá siendo legal. Tendremos que esperar un tiempo para comprobar si realmente este nuevo sistema de seguridad es realmente efectivo y consigue acabar con las falsificaciones monetarias.

 
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