Erdogan asegura que el triunfo del sí abre el camino a la pena de muerte en Turquía
Turquía no practica ejecuciones desde 1984, pero el respaldo a la pena capital aumentó tras el golpe de estado fallido
Ankara
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha reiterado este sábado que una victoria del sí en el referéndum que se celebra mañana sobre un sistema presidencialista de amplios poderes allanaría el camino para reintroducir la pena de muerte.
"Hermanos, mi decisión sobre la pena de muerte es clara", dijo Erdogan ante sus simpatizantes en Estambul en el último día de campaña, según recoge el canal NTV.
"Si el Parlamento la adopta (la pena de muerte) y me la presenta, voy a aceptarlo y pondré fin a la cuestión. Si eso no ocurre, vamos a celebrar otro referéndum y la nación decidirá", prometió el presidente turco.
"La decisión de mañana allanará el camino para ello", agregó sobre reintroducir la pena de muerte, abolida en 2004.
Para ese cambio legislativo se necesita la aprobación de dos tercios del Parlamento, mientras que para convocar un referendo sobre la pena capital se requiere el 60% de los votos del legislativo.
Dado que el gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, islamista) no tiene una mayoría suficiente para aprobar la medida, tal decisión debería tomarse en una consulta popular.
En cualquier caso, la posible convocatoria de un referéndum para volver a introducir la pena capital no se vería facilitado por la victoria de ningún bando mañana en el referendo.
Turquía no ha llevado a cabo ejecuciones desde 1984, pero entre la población aumentó el respaldo a favor de la pena capital tras el fallido golpe de estado de julio pasado.
La Unión Europea (UE) ha dejado claro que si Turquía introduce la pena de muerte daría por concluido el proceso de adhesión del país, ya que vulneraría una de las condiciones para ser miembro.
Erdogan también aseguró que el referendo será "un punto de inflexión" en las relaciones con la UE y criticó al bloque comunitario por hacer esperar a Turquía durante 54 años a las puertas del club europeo.
Turquía vota mañana si continúa como república parlamentaria o entrega todo el poder ejecutivo al presidente, cargo que ahora ejerce Erdogan.
En la consulta se decidirá así el cambio político de mayor calado desde que la moderna República turca fue fundada tras la caída del Imperio Otomano en 1923.
Erdogan, que realiza varios mítines diarios para pedir el sí, acusa a los partidarios del no de alinearse con "terroristas", tanto en referencia a la guerrilla kurda como a la cofradía de Fethullah Gülen, a la que acusa de instigar el fallido golpe de Estado de julio pasado.
La oposición socialdemócrata y prokurda defiende el no a la reforma y considera que el sistema presidencialista abriría el camino a instaurar una autocracia, por la falta de controles y la tenue separación de poderes que generaría.