La 'abuela gimnasta' regresa a la competición

Berlín

La alemana Johanna Quaas, la gimnasta de competición de mayor edad del mundo, ha vuelto a impresionar a los jueces esta semana en el Festival Internacional de Gimnasia de Berlín. Al ver su dominio en las barras paralelas, una especialidad tradicionalmente masculina, con todo el cuerpo en equilibrio, sus gráciles giros o sus volteretas sobre el tapiz, parece que nunca hubiera oído hablar de reumatismo o de artritis.

Quaas, que tiene su propia entrada en el Libro Guinness de los Récords, había abandonado la competición hacía cinco años, cuando ganó por undécima vez el Campeonato de Tercera Edad frente a una competencia mucho más joven que ella. Pero decidió hacer el más difícil todavía, y probarse a sí misma en la cita berlinesa.

Disciplina no le falta a la audaz abuela, que invirtió medio año en prepararse para su regreso. Cada semana dedica dos días al entrenamiento, un día a natación y otro a gimnasia para mayores, además de ejercicios de movilidad diarios, que han derivado en un cuerpo y una agilidad envidiable. "Siento el impulso de moverme, como un niño", ha asegurado la anciana en declaraciones a la televisión pública RBB.

De la misma edad que la reina Isabel II de Inglaterra, esta delgada y pequeña mujer de 152 centímetros de altura es un ejemplo de superación, que no dudó incluso en saltar de un paracaídas, como cuando acompañó al actor Daniel Craig en la apertura de los Juegos Olímpicos de 2012 en Londres. Lleva más de 66 años dedicada a la gimnasia deportiva, pero empezó muy tarde -a los 20 años-, cuando muchas atletas profesionales abandonan su carrera. En Berlín, no ha hecho pódium, pero ha logrado un loable cuarto puesto frente a unos competidores que podrían ser sus hijos.