El Congreso aprueba las actividades privadas de diputados con el no del PSOE
PP, Unidos Podemos y Ciudadanos votan a favor y el PSOE se opone al considerar que deben tener dedicación exclusiva
Madrid
PP, Unidos Podemos y Ciudadanos han votado a favor de un dictamen que ha estado bloqueado casi un año por falta de acuerdo. El PSOE se ha opuesto al considerar que los diputados deben tener dedicación exclusiva y no percibir remuneración al margen del escaño. Es la primera vez que el dictamen de compatibilidades se aprueba sin unanimidad.
El Congreso ha aprobado este jueves el dictamen por el que se autorizan las actividades extraparlamentarias de los diputados, un informe que habitualmente se aprueba al inicio de cada legislatura, por unanimidad de todos los grupos, y en una votación secreta en el pleno. En esta ocasión, sin embargo, ha estado bloqueado casi un año ante la falta de acuerdo político, ya que el PSOE exigía explicaciones adicionales sobre una treintena de casos de diputados del PP, Unidos Podemos y Ciudadanos.
¿Qué defiende cada partido?
El PSOE cree que con la dedicación absoluta no es suficiente, sino que los diputados deben tener dedicación exclusiva al escaño, dicho de otro modo, pide que los parlamentarios no cobren por otras actividades al margen del escaño, aunque no se opone a que ejerzan las que sí autoriza la ley. Además, exige supervisión de lo que declaran sus señorías y eventualmente sanciones para quien vulnere las compatibilidades.
El PP cree que no se puede cambiar el criterio interpretativo sobre las incompatibilidades sin cambiar la ley e insta al PSOE a que plantee cualquier cambio en el marco adecuado, una reforma legislativa, porque de otro modo se pone bajo sospecha a todos los diputados. Llegado el momento, no se oponen a buscar fórmulas para que el Congreso tenga mayores competencias supervisoras sobre lo que hacen sus señorías.
Unidos Podemos ha votado a favor porque todas las declaraciones están avaladas por los letrados del Congreso y cumplen el marco normativo actual que, eso sí, consideran urgente cambiar para hacerlo más exigente. Recuerdan además que su código ético ya incluye limitaciones salariales y renuncia a privilegios.
Ciudadanos apuesta por regular mejor los conflictos de intereses, aumentar el control y la transparencia, pero cree que no se puede exigir a los diputados que renuncien a actividades profesionales privadas, porque eso les convertiría en “funcionarios de la política”, cosa que empobrecería la actividad pública y alejaría a los parlamentarios de la sociedad civil.
¿Para qué actividades piden permiso sus señorías?
La ley impide simultanear el cargo de diputado con otras actividades, salvo que se trate de tareas de docencia, producción literaria, científica, artística o técnica, o la mera gestión del patrimonio personal. Y establece algunas prohibiciones claras, como que no se contrate con el sector público, el asesoramiento remunerado de empresas o la vinculación con entidades financieras. La cuestión es que, a renglón seguido, la propia legislación señala que las Cortes podrán analizar y en su caso autorizar las actividades que declaran sus señorías y ahí es donde comienzan las interpretaciones y la polémica, ya que nadie supervisa que lo declarado se ajusta a la ley ni tampoco hay previstas sanciones.
El PSOE había mostrado sus objeciones sobre una treintena de casos de diputados de PP, Unidos Podemos y Ciudadanos de los que quería explicaciones adicionales. Hay desempeños profesionales variados, desde el ejercicio de la abogacía que plantean diputados como Rafael Hernando, del PP, o las charlas, conferencias, y programas de televisión que declara Pablo Iglesias, de Podemos, como director del programa Fort Apache. También hay casos de diputados que declaran actividades de consultoría, administradores de sociedades mercantiles, arquitectos, o actores como Toni Cantó de Ciudadanos. Sus grupos respectivos señalan que todos cumplen con la ley y han pedido que, como siempre, el dictamen de las autorizaciones se vote en bloque y no caso a caso. Así las cosas el dictamen se aprobará con el voto a favor de PP, Unidos Podemos y Ciudadanos y el rechazo del PSOE.