Un coronel de la Guardia Civil al frente del centro europeo antiterrorista de Europol

Madrid

Su primer destino fue el Servicio de Información de San Sebastián en 1985. A partir de aquí la vida profesional del coronel de la Guardia Civil Manuel Navarrete siempre ha estado vinculada a ETA y al terrorismo yihadista radical.

Lleva exactamente un año en La Haya dirigiendo el centro europeo contra el terrorismo de Europol en un momento realmente complicado para Europa ante la oleada de atentados yihadistas que ha sacudido a Francia, Bélgica y Alemania principalmente en el último año y medio. El coronel Navarrete se encarga de coordinar y realizar programas en materia de terrorismo con los Estados miembros, desde control de armas y explosivos hasta transacciones financieras sospechosas con terceros países De hecho trabaja de forma muy directa con EEUU y Rusia.

El último informe anual de Europol publicado hace dos semanas vuelven a dibujar una amenaza real: 718 presuntos radicales islamistas detenidos durante el 2016, cuatro veces más que en el 2012 y de este total uno de cada cuatro son mujeres y un tercio tiene menos de 25 años. Alrededor de 5.000 ciudadanos residentes en países europeos se han integrado como combatientes extranjeros en las filas del Dáesh en Siria e Irak y de estos un tercio ya ha regresado, en un flujo de retorno a la UE inferior a las previsiones de los servicios antiterroristas.

Desde Europol se vigila de forma muy exhaustiva e intensa los posibles movimientos que se pueden dar desde países desestabilizados como Libia, Somalia, Yemen o incluso Indonesia. Aquí en España preocupa sobre todo Libia ante la posibilidad de que sea utilizada por grupos terroristas como Dáesh y Al Qaeda como escenario base para programar y diseñar atentados en Europa.