El Athletic remonta en Atenas y se queda a un paso de la Europa League
El equipo de Ziganda dio la vuelta a un peligroso 2-0 en cuestión de minutos, dos tantos de Aduriz y otro de Óscar de Marcos colocan al conjunto bilbaíno con pie y medio en la segunda competición continental
El Athletic Club ha renacido en Atenas cuando parecía hundido y ha levantado un 2-0 en contra ante el Panathinaikos para ganar por 2-3 y encarrilar su presencia en la Fase de Grupos de la Liga Europa liderado por el juego del bullicioso Iker Muniain y los goles del eterno Aritz Aduriz.
Fue un visto y no visto en apenas nueves minutos, del 66 al 74, para pasar de un merecido 2-0 a favor del equipo del trébol a un 2-3 que casi no se creían ni los más incondicionales aficionados bilbaínos presentes en el abarrotado Apostolos Nikolaidis.
Después de que el finlandés Robin Lod marcase el 1-0 en el minuto 29 y el ecuatoriano Bryan Cabezas el 2-0 en el 55, entre Muniain y Aduriz fabricaron el 2-1 que cambió el partido. Muniain templó un centro perfecto a pie cambiado desde la izquierda y Aduriz se elevó sobre la defensa local para cortar distancias.
No habían pasado cuatro minutos cuando una conexión de laterales entre Mikel Balenziaga y Oscar de Marcos permitió a su equipo empatar en una jugada casi calcada, si bien con Balenziaga centrando con la izquierda y De Marcos rematando de volea con el pie.
Cerró la remontada otro gol de Aduriz, en esa ocasión de penalti. Una falta máxima en la que ya había tenido mucho que ver al abrir a Iñaki Williams tras aprovecharse de un error un error local en la salida del balón. El brasileño Rodrigo Moledo atropelló a Willams y Aduriz superó a Vlachodimos a 'lo Panenka' aunque el meta verde estuvo a punto de atajar el balón.
Arrancó mejor el Panathinaikos, que para el minuto 6 ya había dado el primer susto a un Athletic muy flojo en la primera mitad, sin apenas peligro en ataque, superado en medio campo y fácilmente desbordado en defensa.
Esa primera acción la solventó Aduriz, que evitó que el central Koutrombis fusilase a Herrerín en un barullo en el área visitante que derivó en un córner que remató en el primer palo, aunque muy desviado, Moledo.
No creó mucho más peligro el conjunto griego antes del 1-0 casi a la media hora de juego. Pero sí fue avisando que le había cogido mejor el pulso al partido y que el sueco-uruguayo Guillermo Molins, excompañero de Beñat en el Betis, se imponía en el juego aéreo al centro de la defensa bilbaína.
Por ahí llegó el primer tanto. Molins se adelantó a Etxeita, tocó hacia atrás a la llegada de Lod y Altman, De Marcos dudó a quien seguir y el finlandés Robin Lod controló y definió perfecto ante el batido Herrerín.
Acusaron el golpe los leones y el Panathinaikos pudo hace más sangre, pero se conformó con la ventaja y llegó al descanso contento con el 1-0 en medio de un amago de reacción rojiblanca, lastrada por la imprecisión en el juego y la falta de abastecimiento a los goleadores Aduriz y Raúl García.
Lejos de mejorar, en la segunda parte empeoraron las cosas para los de Ziganda, que no hizo cambios en el descanso. Si movió ficha a los pocos minutos de la continuación Marinos Ouzounidis, que dio entrada al ex del Leganés Luciano, quien además mejoró a los suyos.
Un buen remate el brasileño con mucha rosca, que se marchó fuera avanzó el segundo tanto. Llegó tras una diagonal de Lod hasta la frontal a la que no llegó Luciano ni despejó Balenziaga, El balón llegó a Cabezas que, solo. fusiló de nuevo a Herrerín.
Esta vez sí reaccionó. Lo hizo rápido y con contundencia liderado por un enrabietado Muniain y un colosal Aduriz, ayudados por Balenziaga, De Marcos y Williams.
Muniain y Aduriz fabricaron el 2-1, Balenziaga y De Marcos calcaron la jugada en el 2-2 y Aduriz desde los once metros, tras un penalti más que claro de Moledo a Williams, puso un 2-3 que ratificó Iago Herrerín con una gran parada en una mano a mano en el que se le presentó un jugador rival en el minuto 91.
En definitiva, que el Athletic renació cuando se veía hundido y casi eliminado con un 2-0 a la hora de partido de la mano de un Muniain irreductible y un Aduriz en su línea de enorme goleador europeo que acostumbra en una Liga Europa en la que a los de Ziganda parece que les espera ya la Fase de Grupos.