Planeta premia una novela de Javier Sierra sobre la bondad de las palabras
'El fuego invisible', de Javier Sierra, galardonada con el Premio Planeta y 'Niebla en Tánger', de Cristina López Barrio, finalista
Barcelona
El año en que el Grupo Planeta decide trasladar su sede social de Barcelona a Madrid, el año en que su presidente José Crehueras apela al diálogo político para resolver el conflicto catalán, el año en que la organización confirma -sin demasiada seguridad- que el galardón se seguirá entregando en Barcelona. Ese año, que es este 2017, la 66 edición del Premio Planeta galardona a un superventas, Javier Sierra, que se embolsa los 601.000 euros del premio por su novela El fuego invisible. En tiempos de incertidumbre y tensión, Planeta premia al rey del thriller histórico-misterioso, si es que el género existe, por una novela que reivindica el uso bondadoso de las palabras.
Sierra (Teruel, 1971), que combina en su obra elementos históricos con enigmas y misterios, dice en su perfil de Twitter que su obra explora los límites ente este y otros mundos, y en El fuego invisible explora precisamente "la fuerza creativa que reside en las palabras". La historia de un joven profesor de filología de raíces españolas que trabaja en el Trinity College de Dublín, obligado a viajar a Madrid. Sierra presentó El fuego invisible bajo el seudónimo de Victoria Goodman, el nombre de uno de los personajes de la novela y clave de la historia: "Es un mensaje encriptado, es la victoria del hombre bueno, porque es en la palabra, en el uso de la palabra, donde está el origen de la bondad y de la maldad". Sobre el título de la novela, Sierra explicaba al recoger el premio, que "es algo que tienen ustedes dentro, que pueden usar para el bien o para el mal". Un viaje, explicaba el autor, en el que los protagonistas deberán resolver el origen de una palabra que en el siglo XII cambió la historia de Europa, la palabra grial.
El ganador del Premio Planeta, formado en el mundo el periodismo, dirigió la revista Más Allá de la ciencia y ha sido presentador y director de espacios en radio y televisión. Sus novelas han sido traducidas a más de cuarenta idiomas entre ellas La cena secreta (la primera novela española en enterar en el top ten de las novelas más vendidas de Estados Unidos), 'La dama azul', 'La ruta prohibida', 'Las puertas templarias', 'El ángel perdido', El maestro del Prado' o 'La pirámide inmortal'.
¿Y la novela finalista? Niebla en Tánger, de la escritora y abogada Cristina López Barrio, una historia "alimaña", como la ha definido su autora, citando a Cortázar, una novela "muy cercana a mí emocionalmente", ambientada en 2015, que cuenta el "viaje a Tánger y el viaje emocional de una mujer en crisis que se busca a sí misma". La novela comienza cuando una mujer, Flora Gascón, despierta en la habitación de un hotel de la Gran Vía, junto a un hombre desnudo y sobre el escritorio de la habitación, una novela titulada Niebla en Tánger.
López Barrio, experta en propiedad intelectual, debutó en la literatura con una novela juvenil. Es autora de 'La casa de los amores imposibles' -traducida a 15 idiomas y publicada en 20 países-, 'El cielo en un infierno cabe' y 'Tierra de brumas'.
Y, más allá de los premiados, esta edición del Planeta ha tenido un perfil bajo en lo político. En la pasada edición, el rey Felipe VI compartió mesa con Carles Puigdemont y la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Este año, el secretario de Estado Fernando Benzo asistía a la cena del premio junto a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, además del conseller de Empresa Santi Vila, Xavier García Albiol, Inés Arrimadas y Miquel Iceta.