El Barça no encuentra portería en Atenas

Sacó Valverde un once con cosas algo diferentes, con una medular muy potente formada por Busquets, Sergi Roberto, Denis y Paulinho, con la intención de que tanto el brasileño, como Denis, como Roberto pudieran asociarse con Messi y Luis Suárez. Una idea prometedora que sin embargo no tuvo un desempeño tan bueno como se podría esperar.

El Georgios Karaiskakis berreaba con fiereza, con la moral intacta después de que su equipo arrancara regular en Liga y no haya sido capaz de estrenar el casillero de puntos en el Grupo D de la Champions. El ambientazo era extraño ante la tesitura de medirse un casi eliminado frente a un casi clasificado, quizás por eso el choque arrancó denso y sin fluidez alguna.

Empezó el Barcelona algo mejor que los locales, buscando la espalda de los griegos y apoyándose en la capacidad de Denis para asociarse. Luis Suárez tuvo un mano a mano ante Proto pero estaba invalidado, y así empezó una noche aciaga para el uruguayo, que no termina de encontrar la suerte dentro del área.

Parte del mérito de la frustración del ataque blaugrana la tuvo la zaga de Olympiacos, que sin estar especialmente atinados en la marca siempre terminaban llegando a tiempo para molestar lo justo. Messi tuvo el gol en el minuto 15 en una jugada de estrategia pero en este caso fue Proto el que desbarató la ocasión. Las ocasiones iban llegando con cuentagotas.

Olympiacos pudo hacer su gol también en una llegada por la banda de Elabdellaoui que se plantó solo delante de Ter Stegen hasta que una aparición milagrosa de Umtiti terminó desviando la pelota. El Barça era dueño del balón pero no de la brillantez, ni siquiera Messi fue capaz de batir a Proto de falta, otra vez el meta sacaba la pelota. El fin de la primera parte acabó con la lesión de Sergi Roberto que obligó a Deulofeu a salir antes de tiempo.

Suárez, cegado de cara a gol

Ampliar

La segunda mitad supuso todo un ejercicio de impotencia goleadora en Atenas. Los indicios que se dejaron ver en los primeros 45 minutos terminaron de certificarse en la segunda mitad. Engels y Botía se hicieron gigantes dentro del área ante un Barça que no supo cómo hacer daño de forma continuada. Incluso Valverde volvió al libreto clásico quitando a Paulinho y metiendo a Rakitic, pero ni con esas.

Luis Suárez vio a Proto más veces cara a cara que cualquier español a Ferreras una mañana cualquiera. Llegaba y encaraba al meta, pero la cosa nunca acababa bien. En una muy clara, el uruguayo acabó cediendo el balón a Messi y este sorprendido falló cuando lo tenía todo a favor. En el minuto 70 otra vez Suárez marraba una ocasión que se marchaba a la izquierda de Proto.

La última y más clara fue un mano a mano en el que el charrúa tiró un globo que acabó aterrizando en el larguero tras superar a Proto. No había manera. Messi lo siguió intentando de falta y desde fuera del área pero allí estaba Proto, el protagonista de un partido que el Barça olvidará pronto.

El equipo de Valverde pierde la posibilidad de cerrar la clasificación pero mantiene una posición cómoda para ser primero de grupo.