El Gobierno aprueba la adhesión de España a la cooperación en defensa de la UE
La Fundación Alternativas prepara un documento que aborda las cuestiones en temas de seguridad y defensa que se plantean tras la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
España, junto con otros 20 países, espera adherirse oficialmente el lunes a la Cooperación Permanente Estructurada en Defensa (PESCO) de la UE.
Madrid
Este viernes, la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha llevado al Consejo de Ministros la propuesta de que España se incorpore a la Cooperación Permanente Estructurada en Defensa (PESCO, en sus siglas en inglés) de la UE. Se aprueba hoy en el Consejo de Ministros, pero se firma oficialmente el lunes en Bruselas. "El próximo lunes, si todo va como corresponde, tendremos la ocasión de firmar físicamente la adhesión a la PESCO", dijo Cospedal en una rueda de prensa después de una reunión de ministros de Defensa de la OTAN.
Se prevé que, además de España, otros 20 países se sumen a este proyecto. Además de Francia, Alemania e Italia - los principales defensores de esta cooperación junto con España - también participarán Bélgica, Países Bajos, Luxemburgo, República Checa, Finlandia, Estonia y Rumania. Después de la firma del lunes, la aprobación formal tendrá lugar a mediados de diciembre por los jefes de Estado y de Gobierno de la UE.
Aunque la participación en esa cooperación reforzada no exige requisitos, los países sí deben asumir ciertos "criterios y compromisos". Compromisos que incluyen, entre otros, aumentar el gasto de defensa, mejorar las capacidades militares y participar en determinados proyectos. Cospedal explicó, también, que este proyecto debe permitir que "Europa ofrezca todas sus capacidades para la defensa de los ciudadanos europeos" en colaboración con la OTAN.
El brexit, una oportunidad para Europa para avanzar en defensa
La adhesión de estos países a la PESCO puede entenderse, también, como un intento de compensar la salida del Reino Unido de la Unión Europea. Este miércoles, en la presentación del documento "La Europa de la defensa y la seguridad después del Brexit" organizado por la Fundación Alternativas, su autor Diego López Garrido, ex secretario de Estado para la UE, planteó la posibilidad de que la salida del Reino Unido pueda ser una oportunidad para fortalecer la estructura de seguridad y cooperación europea.
Sobre la PESCO en concreto se pronunció en este encuentro Nicole Koening, subdirectora de Investigación del Instituto Jacques Delors de Berlín. Koening se cuestiona si los 27 Estados serán capaces de aprovechar la oportunidad que deja el Brexit. En su opinión, el proyecto (PESCO) será positivo siempre que sea ambicioso y que consiga aglutinar a todos los estados miembros.
El Brexit plantea una serie de cuestiones en cuanto a la capacidad y liderazgo en la seguridad y defensa de la Unión. Cuestiones que se abordan, precisamente, en este documento de la Fundación Alternativas. Los analistas y expertos coinciden en que la salida del Reino Unido tiene ventajas e inconvenientes. Inconvenientes, porque la Unión, sin el Reino Unido, pierde capacidad militar, industrial y de inteligencia. Y ventajas porque puede ser, a su vez, una oportunidad para relanzar la política común en defensa. "El Reino Unido ha sido el máximo bloqueador de iniciativas europeístas dentro de la Unión Europea, es el líder de la parte bloqueante de la UE", explica Garrido.
Tanto Garrido como Koening, coinciden en afimar que la aportación británica en la defensa conjunta europea es más bien pobre. Según Garrido, el Reino Unido "no ha participado mucho en misiones de la Unión Europea. No se puede decir que haya sido un socio preponderante, ni muy visible en las misiones militares europeas. Suele quedar de perfil, permite que se hagan, pero no es el protagonista". En cualquier caso, en su opinión, es necesario hacer un acuerdo con Reino Unido en temas de seguridad y defensa después del Brexit. "La UE es un socio que aporta al Reino Unido y a su vez el Reino Unido es útil para la Unión".